La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, va a reducir en dos tercios el número de representantes de los sindicatos en el consistorio de la capital, en virtud del plan de viabilidad 2012-2020 aprobado por el Ayuntamiento para acogerse al crédito de 35.000 millones de euros para el pago a proveedores.
Botella ha informado en rueda de prensa tras la reunión semanal de su Gobierno de la aprobación hoy de ésta y otras medidas en materia de personal en cumplimiento de ese plan de ajuste, que fue ratificado ayer por el Pleno municipal con el voto afirmativo de la mayoría absoluta del PP, el rechazo del PSOE e IU y la abstención de UPyD.
En concreto, se van a suprimir 268 de los 398 liberados institucionales y delegados sindicales del Ayuntamiento, lo que supone el 67,33 %, hasta un número de 130, han indicado a Efe fuentes municipales.
Este es el número que resulta de aplicar la escala que establece la Ley Orgánica de Libertad Sindical.
Los liberados sindicales son los miembros de los sindicatos designados por el Ayuntamiento en función de la representación obtenida en las elecciones sindicales del consistorio para participar en todos los procesos de negociación que afectan a las condiciones laborales de todo el personal.
Los delegados son los representantes de los sindicatos en los centros de trabajo que, en función de las horas sindicales que tienen según la representación obtenida en las elecciones sindicales, pueden estar liberados o no, en toda o en parte de su jornada laboral.
El Gobierno municipal no ha cuantificado de antemano qué ahorro supondrá esta medida pero señala que, al suprimir estos puestos, va a recuperar a 268 trabajadores par reforzar la plantilla en determinados servicios.
También ha aprobado hoy la Junta de Gobierno del Ayuntamiento la suspensión desde el próximo 1 de abril de algunas ayudas sociales de las que se beneficiaban los empleados públicos del Ayuntamiento: premios especiales y prestaciones derivadas de la acción social -como ayudas para gafas y tratamientos dentales- excepto la ayuda por discapacidad y la del transporte.
Por la suspensión de los premios especiales, el Ayuntamiento de Madrid se ahorrará 7,8 millones de euros este año y 13,9 en el siguiente y por la acción social 11 y 13 millones de euros, respectivamente.
La alcaldesa ha indicado que esta suspensión está prevista en el artículo 38.10 del Estatuto del empleado publico, que confiere a los órganos de gobierno de las administraciones públicas, excepcionalmente y por causa de interés público derivada de una alteración sustancial de las circunstancias económicas, la suspensión o modificación del cumplimiento de pactos y acuerdos ya firmados en las medidas estrictamente necesarias para salvaguardar el interés público.
En virtud del plan de ajuste 2012-2022, que también prevé suprimir la subvención nominativa a los sindicatos, que asciende a 306.000 euros al año, el Ayuntamiento de Madrid ahorrará 160 millones de euros este año y 394 en 2013, para comenzar a estabilizar su presupuesto a partir de 2014 y generar superávit en los ejercicios siguientes.