La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha asegurado este martes que el Ayuntamiento entraría únicamente en la propuesta de construir un Las Vegas a la europea en el caso de que el Gobierno de la Nación decidiera liderar el proyecto y siempre respetando unas "líneas rojas" que no se podrían traspasar. "Solamente el liderazgo del Gobierno de la Nación, si decide acometer el proyecto, haría que nosotros entráramos en él y las líneas rojas se respetarían", ha aseverado la primera edil en la sesión de control del primer Pleno municipal del año.
La pregunta ha llegado al Palacio de Cibeles de la mano del portavoz de IU en el Ayuntamiento, Angel Pérez, que ha arremetido contra el tratamiento que podría obtener "determinado feriante americano", el magnate Sheldom Adelson, quien busca "que le regalen cinco millones de metros cuadrados, que le regalen suelo público y privado, expropiado con coste al erario público".
A eso le suma la pretensión de aprobar una zona franca "en la que los extranjeros no pagaran impuestos, estar diez años sin pagar IBI y con exenciones en otros impuestos" y todo a cambio de invertir dinero para generar unos 300.000 puestos de trabajo.
Todo esto es para Pérez un "saqueo al generoso pueblo de Madrid". Las peticiones de Adelson incluyen además la construcción de intercambiadores, un helipuerto con terminales privados, accesos desde las principales vías, el desmantelamiento de la Cañada Real, entre otras cosas.
Pérez ha recordado que la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, ya dijo que "todo es negociable" dentro de sus principios, razón por la que ha preguntado a Botella por los suyos añadiendo que el modelo que propone el magnate "rompe la cohesión y se basa en la indignidad del ciudadano".
Botella, por su parte, ha recordado que quien inició las conversaciones fue el anterior ministro socialista Miguel Sebastián para añadir, a renglón seguido, que "solamente el liderazgo del Gobierno de la Nación, si decide acometer el proyecto", haría que el Ayuntamiento entrara en él, "con el acuerdo de las tres administraciones" y siempre respetando las "líneas rojas" que no se podrían traspasar. La alcaldesa ha subrayado que "hay que estudiar" el proyecto cuando se habla de generar un importante número de empleos. La primera edil ha concluido pidiendo "máxima prudencia con cuestiones que puede que nunca sean realidad".
LISSAVETZKY PIDE QUE SE DEJE DE "JUGAR AL MONOPOLY" CON MADRID ESPACIOS Y CONGRESOS
El portavoz socialista en el Consistorio de Madrid, Jaime Lissavetzky, ha reclamado este martes en el primer Pleno del año que "se deje de jugar al monopoly o al palé" con la empresa municipal Madrid Espacios y Congresos retomando su objeto social inicial --la gestión de los recintos feriales-- y que no siga siendo "la caja B del Ayuntamiento".El edil ha recordado que el pasado 29 de diciembre se aprobó una ampliación de capital social de 30 millones de euros para una empresa "que era solvente y que ahora está descapitalizada y en mala situación por pagar las deudas" del Ayuntamiento. "Con esos 30 millones se podrían hacer muchas cosas y no recurrir a voluntarios obligados", ha manifestado el socialista.
La alcaldesa, Ana Botella, ha contestado en la sesión de control que Madrid Espacios y Congresos seguirá "impulsado la creación de empleo y riqueza" en la ciudad al tiempo que favorece el desarrollo de los distritos donde se encuentran sus instalaciones (Madrid Arena, Caja Mágica, el Palacio Municipal de Congresos, el edificio Appot y los recintos feriales de la Casa de Campo). Dichas instalaciones, como ha remarcado Botella, juegan "un papel fundamental en el turismo, un sector que en 2011 alcanzó los mejores resultados de la historia"
Lissavetzky ha contestado que Madrid Espacios y Congresos se encuentra, sin embargo, "en la peor situación de su historia" ya que la deuda sube mientras que los ingresos se mantienen y todo por haberla empleado como "la caja B de la financiación del Ayuntamiento". "Como había mucha deuda tenían que centrifugarla y cambiaron el objeto social introduciéndola en la actividad inmobiliaria cuando existe una empresa como la EMVS", ha argumentado el concejal.
SÓLO IU SE OPONE A QUE FRAGA TENGA UNA CALLE EN MADRID
El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado hoy con los votos a favor del PP, el PSOE y UPyD y el rechazo de IU la propuesta de la alcaldesa, Ana Botella, de dar el nombre de Manuel Fraga a una calle o plaza de la ciudad. Antes de la votación, el Grupo Socialista ha propuesto por boca de la concejala Ana García D'Atri, que todos los ponentes de la Constitución Española de 1978, como lo fue Fraga, den su nombre a un espacio público de la capital de España, el primero de ellos Jordi Solé Tura, de acuerdo a una propuesta que llevarán al Pleno del próximo mes de febrero.
Izquierda Unida, que decidió su voto en la reunión de su Grupo Municipal celebrada ayer, no ha intervenido para justificar su posición. Sí ha intervenido la alcaldesa, que ha dicho que dar a una calle el nombre de Manuel Fraga "es rendir homenaje a la capacidad de los españoles por superar las dificultades en un determinado momento histórico", en este caso la transición, que a su juicio es "una lección que sigue viva" e "invita a todos a sumar energías".
Botella ha dicho que respeta la posición de IU de votar en contra pero que cree que "tributando un homenaje" a Manuel Fraga se está haciendo también al momento de la historia de España del que "todos" los españoles deben "sentirse orgullosos".La alcaldesa, que ha expresado su acuerdo con la propuesta del PSOE de que todos los padres de la Constitución lleguen a estar en el callejero de Madrid -en el que sólo aparecen personas fallecidas-, ha definido a Fraga, fallecido el pasado día 15, como "un político que ha sido ejemplo para los políticos".
