Las salidas de Madrid por la A-3 y la A-5 registraban pasadas las 10.30 horas de hoy importantes atascos de los conductores que se dirigen hacia la Comunidad Valenciana y Extremadura para disfrutar de las vacaciones de Semana Santa.
Según datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), en la A-3 había seis kilómetros de retención a la altura de Villarejo de Salvanés y otros ocho en Fentidueña, ambas localidades de la Comunidad de Madrid.
Por su parte, en la A-5 la circulación era lenta en Cazalegas (Toledo), con diez kilómetros de atascos y antes, en Navalcarnero (Madrid), con cinco kilómetros, mientras que en la provincia de Ciudad Real los problemas se registraban en la A-43 en Tomelloso.
Los vehículos que circulaban por la antigua carretera de La Coruña, la N-VI, se encontraban con dificultades en San Rafael (Segovia), con cuatro kilómetros de circulación muy lenta.
Ya en el norte, los problemas se detectaban en la AP-8 en Irún y en la A-8 en Castro Urdiales (Cantabria), mientras que en la A-23 un accidente dificultaba la circulación en Calamocha (Teruel).
Otro siniestro tenía retenido el tráfico en la A-7 a la altura de la localidad valenciana de Riba-roja del Turia.
Las adversas condiciones meteorológicas están afectando a la circulación en diversos puntos de la red viaria, como en las carreteras en Navarra, especialmente en la zona de Tierra Estella, si bien sólo se mantienen restricciones en la NA-132-A entre los kilómetros 8,5 y 19,5 por encharcamientos.
En Huesca, la circulación estaba interrumpida por avalanchas en la A-2606 en Baños de Panticosa y era complicado circular por la A-23 en Gurrea de Gállego.
Las inundaciones afectaban a algunas vías secundarias Cádiz, Segovia y Soria.
La segunda fase de la operación especial de Tráfico de Semana Santa comenzó a las tres de la tarde de ayer y concluirá a las doce de la noche del lunes, 1 de abril, un periodo en el que se esperan 7,5 millones de desplazamientos.