Los diputados han estrenado una Asamblea renovada, con cambios para evitar fallos al votar y que se vaya la luz cada dos por tres.
El coste, casi dos millones de euros. Con las obras, de gran envergadura, cambian las instalaciones audiovisuales de la Asamblea, que datan del proyecto de construcción de la nueva sede del Parlamento regional, en Vallecas, en los años 1995-1996.
Y se renuevan los paneles de votación de los diputados, con averías frecuentes.
Con las obras, aumentan el número de cámaras para la retransmisión de las comisiones y los plenos que, en el caso del hemiciclo, pasan de seis a ocho.