El Pleno de la Asamblea General de la Cañada Real ha celebrado este jueves la sesión constitutiva de este órgano de debate y participación de las administraciones públicas, los grupos políticos, las entidades sociales y las asociaciones de vecinos, contemplado en el Pacto Regional firmado el pasado mes de mayo. Con la Asamblea formalmente constituida, la próxima semana se pondrán en marcha las tres ponencias técnicas, urbanística/medioambiental, jurídica y económica, que estudiarán la solución más adecuada para los sectores del II al V de la Cañada, que pertenecen a los municipios de Madrid y Rivas Vaciamadrid.
Esta primera sesión del Pleno ha supuesto un encuentro histórico para la Cañada, ya que es la primera vez que los vecinos y entidades sociales se han encontrado con las administraciones en una misma sala para discutir la problemática de la zona, afectada por la marginación desde hace años.
A la reunión han asistido, además de portavoces de ONGs y asociaciones vecinales, representantes de todos los grupos políticos que conforman la Asamblea de Madrid y los ayuntamientos por los que transcurre la Cañada (Madrid, Rivas y Coslada).
En este sentido, la Asamblea actuará como un órgano participativo que elevará las propuestas aprobadas por la mayoría al Comité Ejecutivo de la Cañada Real, conformado por un representante de cada uno de los tres ayuntamientos, dos miembros de la Comunidad de Madrid y uno de la Delegación de Gobierno, que a efectos prácticos será el que tome las decisiones.
Ambas cámaras contarán con la presencia del comisionado de la Comunidad para la Cañada Real, José Antonio Martínez Páramo, y del comisionado municipal de la capital para la Cañada, Pedro Navarrete, que han sido elegidos como presidente y secretario general de la Asamblea, respectivamente.
Esta primera reunión general entre administraciones, entidades y afectados ha servido como oportunidad de debate y participación conjunta para aclarar el Pacto Regional que, en palabras de la Comunidad, "supone el punto de partida para dar una solución definitiva".
UNA ZONA MUY OLVIDADA DE MADRID
A partir de la reunión que previsiblemente tendrá lugar después del verano, el órgano pasará a convocarse cada tres meses para afrontar las problemáticas que afectan la Cañada, la cual ha sido "abandonada" por la Comunidad de Madrid durante décadas, según opinan las entidades sociales. "Los servicios públicos han tenido muy olvidada esta zona de Madrid", señaló este miércoles el párroco de la iglesia de Santo Domingo de La Calzada, Agustín Rodríguez, un conocido activista por los derechos de los pobladores de la Cañada.
Rodríguez es uno de los que conforman la primera línea de acción a favor de los vecinos en colaboración con las entidades sociales y activistas, que, como Cáritas, Cruz Roja o el Proyecto Aspas del Ayuntamiento de Madrid, llevan años ayudando en el barrio.
Todas estas entidades han tenido su presencia en la Asamblea de este jueves, con la que, según el concejal del Grupo Socialista en el Ayuntamiento, Ignacio Benito, "se abre una nueva etapa en la Cañada Real", cuyos problemas requieren de una "solución supramunicipal" liderada por la Comunidad de Madrid en coordinación con los ayuntamientos implicados.
Aparte, Benito ha agradecido la labor de las entidades sociales que actúan en la Cañada, las cuales han supuesto durante años "el único apoyo de los habitantes para salir de la exclusión y la marginalidad".
Pese a estos primeros pasos, el socialista ha advertido que la solución aún está lejos, pero ha destacado que existe "un objetivo común" como para solventar las necesidades de los residentes, por lo que habrá que "trabajar de modo coordinado" y con "voluntad política para iniciar una nueva vida" de los más de 10.000 pobladores de la Cañada.
RECLAMAN SOLUCIONES RÁPIDAS
Algunos vecinos no se han mostrado conformes con el resultado de la Asamblea y han reclamado "soluciones rápidas" frente a los protocolos administrativos, más lentos. "Los vecinos están jugándose su futuro, y eso les genera ansiedad", ha opinado el portavoz de Cruz Roja en la Asamblea, Daniel Ahlquist, quien entiende que "los ritmos y el lenguaje de la administración los entienden los políticos y las entidades sociales, pero se escapan a los vecinos".
Ahlquist, veterano activista en favor de los vecinos de la Cañada, cree que "los tiempos" de los pobladores no cuadran con los de los Gobiernos, que son "más lentos y arduos". "Nosotros nos dedicamos a mediar entre ellos", ha mencionado.
Por su parte, la Primera Teniente de Alcalde y concejal de Urbanismo de Coslada, Charo Arroyo, ha afirmado que la constitución de la Asamblea "es un motivo de satisfacción, puesto que se da participación a todos los afectados para solucionar lo antes posible este problema", y que en el caso concreto de su municipio "ya se ha puesto en marcha un grupo de trabajo para resolver la problemática del sector I".