La presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, ha asegurado que, aunque haya podido cometer "muchísimos" errores a lo largo de su trayectoria política, "nunca" ha tomado ni dejado de tomar decisiones por miedo a las consecuencias o con ánimo de buscar el provecho personal.
Durante su discurso de recepción del primer premio de la Fundación Villacisneros por su compromiso con la libertad y la democracia, Aguirre ha indicado que los casos de casos de corrupción en el PP la llenan de "rabia y tristeza" y que siente "vergüenza" de estar al lado de los "siniestros personajes" que se han aprovechado de la política para "enriquecerse".
Aguirre ha formulado estas palabras tras sucederse desde la jornada de ayer las detenciones o imputaciones del exconsejero de Presidencia madrileño Francisco Granados, seis alcaldes de la Comunidad de Madrid -cuatro del PP- y un alto cargo de la administración regional con motivo de la operación Púnica.
Según Aguirre, cuando los casos de corrupción "asfixian" al Partido Popular, siente vergüenza de que esos políticos pertenezcan a las mismas siglas del partido que llevó a Gregorio Fernández Ordóñez -víctima de ETA- y "a muchos más" a dar la vida por la libertad y por España.
Antes del acto, la presidenta del PP de Madrid ha asegurado que "generalmente" cuando alguien da la cara se la "parten", al ser preguntada sobre la rueda de prensa que ofreció ayer en la que asumió responsabilidades por haber nombrado a Granados.
CUANDO UNO DA LA CARA GENERALMENTE SE LA PARTEN
"Cuando uno da la cara, generalmente te la parten", ha ironizado la presidenta del PP de Madrid, que ha reiterado que no nombró a los cuatro alcaldes del PP investigados, que no conoce a dos de ellos y que, si sale en fotos con ellos, es porque "sale en muchas fotos".
La fundación Villacisneros ha premiado a Aguirre por ser "cercana y sensible" con la causa de las víctimas del terrorismo y ser "consciente" y promover desde sus puestos de responsabilidad el conocimiento de la historia de España.
Han asistido a la entrega el consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid, Pablo Cavero; el delegado del Gobierno en el País Vasco, Carlos Urquijo; el presidente de la Asamblea de Madrid, José Ignacio Echeverría, y representantes de la Asociación de Víctimas del Terrorismo.
En los discursos de este acto, la expresidenta del PP vasco y patrona de la fundación Villacisneros María San Gil ha definido a Aguirre como una mujer "honesta", "trabajadora" y "tenaz" que defiende aquello en lo que cree con "claridad" y "coherencia"
"Otro gallo nos cantaría si tuviéramos a gente como Esperanza dirigiendo este país", ha recalcado San Gil, que se ha mostrado preocupada ante los "frentes nacionalistas" en Cataluña y el País Vasco que pretenden la "ruptura" de España y el "auge del populismo".
El presidente de la fundación, Iñigo Gómez-Pineda, ha destacado la valentía política de Aguirre -la figura del premio es un toro bravo- y ha defendido que "bajo ninguna circunstancia" se puede "arrinconar" a las víctimas cuando, a su juicio, hay un "apagón informativo" sobre cuestiones relacionadas con el terrorismo.
Por su parte, Aguirre ha defendido que, para honrar la memoria de las víctimas y demostrar que se ha derrotado al terrorismo, hay que honrarlas y mantenerse fieles a los ideales que les llevaron a dar su vida por esos valores.