Dos turistas españoles sucuestrados en el norte de Colombia

La policía colombiana, en coordinación con la española y con agentes especiales, busca a dos turistas españoles secuestrados desde el pasado viernes en una zona de Colombia fronteriza con Venezuela.

Se trata de Ángel Sánchez Fernández, de 49 años, y de Conchi Marlaska, de 43 años, quien es familiar del juez español Fernando Grande-Marlaska, jefe de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, y serían naturales de Avilés, en el norte de España.

Fuentes de la Policía colombiana explicaron a Efe que los secuestradores, que se identificaron como miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), se pusieron en contacto el fin de semana con las familias de Sánchez y de Marlaska para pedir un rescate.

Las fuentes indicaron que no está confirmado por ahora que las FARC sean las responsables, ya que es habitual en Colombia que otros grupos se hagan pasar por esta guerrilla para obtener mayores beneficios de la extorsión.

El secuestro sucedió el pasado viernes en el departamento de La Guajira, limítrofe con Venezuela, cuando los españoles se dirigían en automóvil hacia el turístico Cabo de la Vela.

Al parecer los captores, aún sin identificar, provocaron un accidente con el fin de secuestrar a los turistas para trasladarlos posteriormente a la zona fronteriza con Venezuela, que quizás hayan cruzado según las fuentes informantes.

El vehículo de alquiler, modelo Chevrolet Spark fue encontrado abandonado por la Policía colombiana en el caserío de Siapana, en el municipio de Uribia, a pocos kilómetros de la frontera.

De hecho, la Alcaldía y la Policía de esa población ofrecieron hoy 50 millones de pesos (unos 27.050 dólares) a quien informe sobre el paradero de los secuestrados.

Minutos después de que la información del secuestro de los dos turistas viera la luz, esta fue confirmado por el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, en Madrid.

García-Margallo dijo que desde el momento en que el Gobierno español tuvo conocimiento del secuestro, su departamento ha estado "en contacto" con el Ejecutivo del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y con las familias de los dos españoles.

"En los temas de secuestro la norma de la casa es mantener una discreción absoluta", afirmó el jefe de la diplomacia española.

Por su parte, la Embajada de España en Bogotá guarda silencio sobre el secuestro.

Se espera que en las próximas horas las autoridades colombianas se pronuncien de forma oficial acerca del suceso.

La Guajira, en el caribe colombiano, es una región desértica que en los últimos años ha vivido un incremento del turismo que acude en su mayoría al Cabo de la Vela, un accidente geográfico situado en el extremo norte de Sudamérica.

Pero por su posición fronteriza también tiene presencia de diversos grupos armados como la guerrilla de las FARC, bandas narcoparamilitares o cárteles internacionales de la droga, dedicados todos al narcotráfico y el contrabando.

La Policía Nacional de Colombia, que trabaja en coordinación con la española para resolver el caso, ha enviado a La Guajira agentes del grupo especial anti-secuestros y anti-extorsión (GAULA), que trabajan con la posibilidad de que los secuestrados estén en territorio venezolano.

Sánchez Fernández y Marlaska Sedano se unen al geólogo canadiense Jernoc Wobert, en manos del Ejército de Liberación Nacional (ELN) desde el pasado enero, en el contingente de extranjeros secuestrados en Colombia.

El secuestro se conoce en vísperas de la llegada a Colombia del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, para asistir a la Cumbre de la Alianza del Pacífico en Cali.