Robert Lewis Dear, de 57 años, se declaró hoy ante una corte de Colorado (EE.UU.) culpable de los cargos que se le imputan, entre ellos asesinato, por la autoría del tiroteo contra una clínica de planificación familiar el pasado 27 de noviembre que dejó tres muertos y nueve heridos.
"Soy culpable, no hay necesidad de juicio, soy un guerrero por los bebés, ¡Proteged a los bebés!", gritó Dear ante el juez, según recogen varios medios locales.
Dear ha permanecido bajo arresto y sin posibilidad de fianza desde que se rindió ante la Policía el mismo día 27 después de cinco horas atrincherado en el centro del programa de planificación familiar Planned Parenthood de Colorado Springs (Colorado), que incluye clínica de abortos.
Ante los gritos de Dear, sus abogados defensores alegaron que el acusado tiene problemas mentales y pusieron en duda su capacidad para hacer frente a un proceso judicial.
Entre los cargos que se imputan a Dear, se encuentran tres por asesinato en primer grado y múltiples intentos de asesinato, por lo que puede enfrentarse a pena de muerte o cadena perpetua.
Los centros de Planned Parenthood, que practican abortos entre otros numerosos servicios de planificación familiar y salud reproductiva, han despertado una fuerte oposición entre los activistas antiabortistas.
La agencia de planificación familiar, que recibe 500 millones de dólares anuales de fondos federales, tiene 700 centros en todo el país y ofrece servicios a alrededor de 2,7 millones de mujeres.
Desde 1997, en EEUU hubo al menos 73 ataques en clínicas de aborto, según datos de la Federación Nacional del Aborto.
Los ataques se remontan a 1973, cuando se legalizó el aborto a nivel nacional en Estados Unidos tras una sentencia del Tribunal Supremo.