El sheriff del condado de Pima, Clarence Dupnik, lamentó profundamente la tragedia desencadenada ayer en el centro administrativo del condado, Tucson, y aseguró que el estado se ha convertido en "la meca de los prejuicios y de la intolerancia", motivo por el cual sospecha que la congresista demócrata Gabrielle Giffords, ahora mismo en estado grave, podría haber sido el blanco principal del tiroteo.
"Sólo hay que ver cómo responden estos desequilibrados a la bilis que sale de ciertas bocas cuando hablan de acabar con el Gobierno", aseguró el sheriff en referencia a Jared Loughner, presunto autor de los disparos.
"Toda esa rabia, ese odio, la intolerancia que se están viendo en este país comienza a ser escandalosos", estimó el sheriff. "Y creo", añadió en declaraciones recogidas por el diario on line 'The Huffington Post', "que Arizona se ha convertido en una especie de capital, por desgracia".
"Nos hemos convertido en una meca para el prejuicio y la intolerancia", indicó el sheriff, quien hizo públicas sus sospechas de que la congresista fue un blanco específico del ataque y consideró que el sospechoso no actuó sólo.
El sheriff consideró que Loughner es un individuo posiblemente afectado por "un problema mental" que le convierte en una persona "especialmente susceptible" a declaraciones enfervorecidas procedentes de los elementos antigubernamentales, que convierten a los funcionarios públicos en objetivo de sus invectivas.
"Y eso es lo más triste de lo que está sucediendo en América: muy pronto, nos vamos a quedar sin gente razonable y decente que esté dispuesta a arriesgarse para servir al pueblo", concluyó.