Los sindicatos griegos convocaron hoy una huelga general de 24 horas para mañana, martes, en protesta contra las medidas de austeridad que está preparando el Gobierno de unidad nacional para asegurarse más ayuda financiera internacional. Para las 11.00 hora local (09.00 GMT) está prevista una gran marcha en la céntrica plaza Sintagma, según informaron los sindicatos GSEE (sector privado) y ADEDY (sector público).
EL GOBIERNO GRIEGO Y LA TROIKA SE PROPONEN TERMINAR HOY LAS NEGOCIACIONES
El Gobierno de coalición griego de Lukás Papadimos y la troika se han dado un ultimátum hasta hoy para acordar las condiciones de pago de la elevada deuda soberana helena. Los líderes de los tres partidos que forman el Gobierno tienen de plazo hasta el mediodía para informar a Papadimos si aceptan o no las exigencias de la troika, formada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE).
Una vez aceptadas las condiciones por los líderes del Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK), Yorgos Papandreu, el líder del partido conservador Nueva Democracia, Antonis Samarás, y el ultraderechista Rally Ortodoxo Popular (LAOS), Yorgos Karatzaferis, estos deberían reunirse con Papadimos para firmar el acuerdo. A pesar las indecisiones iniciales provocadas por las declaraciones de Samarás y Karatzaferis, ambos han aceptado, junto con Papandreu, la mayor parte de las exigencias de la troika.
Según dijo el primer ministro, hay acuerdo entre los líderes políticos sobre las medidas para reducir el gasto público en un 1,5 % del PIB, las medidas de recapitalización de la banca local y los recortes laborales no salariales. Según fuentes del Gobierno, a la reunión de Papadimos con la troika, en la que participaron el ministro de Finanzas, Evangelos Venizelos, y el ministro de Trabajo, Yorgos Kutrumanis, "hubo un acuerdo para la reducción de los salarios del sector privado de un 20 %".La misma fuente agregó que "probablemente no se eliminarán las dos pagas mensuales extraordinarias" y que se recortarán los complementos de pensiones, tal como había exigido inicialmente la troika.
La patronal y los sindicatos mayoritarios, que han progresado en las negociaciones sobre la reducción de los costes laborales no salariales, han pactado una congelación salarial, pero también rechazan estas medidas de la troika y así se lo hicieron saber al Gobierno en una carta enviada el viernes. "El peligro de que fracasen las negociaciones persiste", declaró a la agencia AMNA el portavoz del PASOK, Panos Beglitis y por eso, "Papadimos pidió al Ministerio de Finanzas que prepare de urgencia un documento sobre las consecuencias de un posible fracaso".