Al menos tres personas murieron hoy en Siria mientras continúa la represión del régimen de Bachar al Asad, según el Observatorio sirio de Derechos Humanos, pese al último llamamiento de la Liga Árabe a detener la violencia en el país.
En un comunicado, el grupo opositor informó del fallecimiento de tres personas esta mañana en la ciudad central de Homs, entre ellos un joven por disparos de francotiradores en un puesto de control en el barrio de Al Bayada.
Dos civiles murieron en el barrio de Baba Amro, también en Homs, por disparos de ametralladoras al tiempo que en la ciudad se libran duros enfrentamientos entre el ejército sirio y hombres armados que supuestamente son militares disidentes.
Además, una fuerte explosión sacudió la zona en el ataque a un blindado del ejército y columnas de humo se elevaron de un edificio gubernamental cerca de la universidad Al Baaz.
Estas operaciones se producen horas después de que la Liga Árabe expresara su preocupación por la violencia en Siria, donde ayer unas cuarenta personas murieron en otro viernes de manifestaciones que exigen la caída de Al Asad.
En un comunicado, la comisión árabe de seguimiento de la situación siria envió anoche un "mensaje urgente" a Damasco para expresar su "rechazo por la continuación de los asesinatos de civiles".
La Liga Árabe dijo esperar que el gobierno sirio "lleve a cabo lo que se requiera para proteger a los civiles y que en la próxima reunión se llegue a resultados serios".
Una comisión de ministros árabes de Exteriores presidida por Catar tiene previsto entrevistarse mañana en Doha (Catar) con funcionarios sirios para propiciar el diálogo entre el régimen y la oposición, de acuerdo con la última iniciativa árabe para solucionar la crisis siria.
En un principio, dicha comisión iba a viajar a Damasco pero en el último momento decidió cambiarse el lugar de la reunión por Doha.
Dicho comité ya viajó a Damasco el pasado 26 de octubre para transmitir al presidente Al Asad su propuesta, que preveía iniciar poco después un diálogo nacional en la sede de la organización panárabe en El Cairo y bajo su supervisión.
La agencia oficial Sana informó hoy de que las fuerzas de seguridad desmantelaron ayer varios artefactos explosivos e incautaron armas a grupos "terroristas", que es como califica el régimen a los opositores, mientras que varios policías resultaron heridos ayer en la ciudad central de Hama.
Los grupos opositores añadieron hoy que cientos de soldados se han desplegado y cortado los accesos en la localidad de Saraqeb, en la provincia septentrional de Idleb.
Además, las fuerzas sirias practicaron redadas en la provincia de Deir al Zur, en el este del país, durante las cuales al menos diez personas fueron detenidas.
Desde mediados de marzo, Siria es escenario de revueltas populares contra el régimen de Al Asad, que se han cobrado la vida de unas 3.000 personas, entre ellas unos 187 menores, según las últimas cifras de la ONU.