Las reparaciones y tormentas tienen en vilo a 200.000 evacuados de la presa Oroville

Los trabajos de emergencia para reparar los daños en la presa Oroville, situada en el norte de California, y las tormentas que en los próximos días podrían agravar la situación mantienen en vilo a las cerca de 200.000 personas que continúan evacuadas por un riesgo potencial de inundación.

Las autoridades dieron hoy una rueda de prensa en Oroville, situada a unos 250 kilómetros al noreste de San Francisco, para detallar la situación después de que el domingo se ordenara la evacuación de los habitantes de la zona por los severos daños detectados en un aliviadero auxiliar de la presa.

El sheriff del condado de Butte, Kory L. Honea, señaló hoy que se mantiene la orden de evacuación en las localidades afectadas de Oroville, Palermo, Gridley, Thermalito, South Oroville, Oroville Dam, Oroville East y Wyandotte. "Cuando sea seguro, basado en las evaluaciones del Departamento de Recursos Hídricos de California (DWR, en inglés) y de nuestros socios federales y estatales, entonces estaremos en una mejor posición para decidir el levantamiento de la evacuación", explicó el oficial, quien recalcó que el "propósito primordial" de sus acciones es "garantizar la seguridad de la población".

La situación mejoró levemente en las últimas horas después de que el DWR informara que a última hora de ayer el nivel de agua en la presa bajó hasta los 275 metros, por lo que se detuvo la liberación de reservas por el desagüe de emergencia.

Concretamente, las autoridades señalaron hoy que la presa arroja al aliviadero principal más de 3.100 metros cúbicos por segundo.

Los problemas en esta instalación comenzaron la pasada semana cuando se halló un gran hoyo en el desagüe principal de la presa, por lo que se cerró esa vía y se abrió el aliviadero auxiliar por primera vez en la historia del embalse. Sin embargo, el domingo se encontró una grieta en el aliviadero auxiliar por lo que, ante la inminente posibilidad de que se desbordara el pantano, la oficina del sheriff del condado de Butte ordenó la evacuación por la "amenaza creíble de un daño potencialmente catastrófico" en el desagüe de emergencia.

El Servicio Meteorológico Nacional (NWS, siglas en inglés) aseguró que el potencial colapso de la estructura de este desagüe daría como resultado "una liberación incontrolada de aguas del lago Oroville".

Según las estimaciones de los medios locales, la emergencia afectó a entre 180.000 y 200.000 personas.

Los problemas de Oroville se han visto agravados por el invierno muy húmedo que está sufriendo California, un estado que ha sufrido una sequía en los últimos años pero que en las pasadas semanas registró excepcionales precipitaciones tanto por su volumen como por su constancia.

Ahora los trabajos a contrarreloj de los servicios de emergencia se centran en reducir la presión sobre las vías de salida de agua y abrir espacio en el pantano para nuevas precipitaciones, ya que las previsiones metereológicas prevén tiempo tormentoso para la segunda mitad de la semana. El gobernador de California, Jerry Brown, declaró el domingo el estado de emergencia en Oroville, mientras que la Guardia Nacional de California puso en alerta y en disposición de entrar en acción de manera inmediata a sus 23.000 efectivos, una medida que no adoptaba este cuerpo desde los disturbios de Los Ángeles en 1992.

Además, se cortaron carreteras y vías de ferrocarril y los 578 presos de la cárcel del condado de Butte fueron trasladados a otra localización a salvo. Los medios locales mostraron en las últimas horas espectaculares imágenes y vídeos de la liberación de aguas en Oroville, el pantano más alto de Estados Unidos con un dique de 230 metros de altura.

Ahora los trabajos a contrarreloj de los servicios de emergencia se centran en reducir la presión sobre las vías de salida de agua y abrir espacio en el pantano para nuevas precipitaciones, ya que las previsiones metereológicas prevén tiempo tormentoso para la segunda mitad de la semana. El gobernador de California, Jerry Brown, declaró el domingo el estado de emergencia en Oroville, mientras que la Guardia Nacional de California puso en alerta y en disposición de entrar en acción de manera inmediata a sus 23.000 efectivos, una medida que no adoptaba este cuerpo desde los disturbios de Los Ángeles en 1992.

Además, se cortaron carreteras y vías de ferrocarril y los 578 presos de la cárcel del condado de Butte fueron trasladados a otra localización a salvo. Los medios locales mostraron en las últimas horas espectaculares imágenes y vídeos de la liberación de aguas en Oroville, el pantano más alto de Estados Unidos con un dique de 230 metros de altura.