(Actualizado

El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, el diputado opositor Julio Borges, ha apostado este martes por incrementar la presión interna y externa sobre el Ejecutivo de Nicolás Maduro para "obligar al Gobierno a negociar, no para quedarse en el poder como quieren ellos sino para que haya una transición democrática".

En declaraciones a los periodistas después de reunirse con el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, Borges ha defendido que en Venezuela aún "hay posibilidad" de una solución dialogada, pero no se dan "las condiciones" para ello, sino que "se necesita mucha más presión del pueblo venezolano, de los países, de los venezolanos en el exterior". No obstante, preguntado si esa presión debe traducirse en sanciones a los dirigentes del régimen, ha respondido que debe hacerse "con la calle" o consiguiendo que la oposición sea recibida por "países que antes estaban lejanos, como Francia".

De hecho, respecto a la falta de consenso entre los países europeos para imponer sanciones individuales, ha replicado que él ve que "toda Europa tiene una visión muy clara" de la situación y que todos los países han rechazado la "Asamblea fraudulenta Constituyente".

El presidente de la Asamblea Nacional venezolana y su vicepresidente fueron recibidos ayer por el presidente francés, Emmanuel Macron, en París.

Hoy en España, además del encuentro con Rajoy y con Dastis, se reunirán esta tarde con la presidenta del Congreso, Ana Pastor, antes de viajar a Alemania, donde se entrevistarán mañana con la canciller, Angela Merkel.

"La lucha por los derechos humanos no tiene fronteras", ha afirmado el opositor venezolano, quien se ha congratulado de que más de cincuenta países "no solo condenan, sino que desconocen a la Asamblea fraudulenta Constituyente".

El diputado ha agradecido el "respaldo decidido y permanente" del Gobierno español a la Asamblea Nacional y al esfuerzo para que hacer posible que la crisis tenga "una solución electoral", elecciones libres "con transparencia".

En las reuniones debía haber participado también Lilian Tintori, esposa del opositor Leopoldo López, pero el Gobierno venezolano la ha impedido salir del país. Desde Carácas, Tintori agradecía hoy en su cuenta de Twitter a Mariano Rajoy: "Gracias Presidente @marianorajoy por escuchar la voz del pueblo venezolano que quiere Democracia, Paz y Libertad", escribió.

Las autoridades de su país le prohibieron viajar tras ser imputada al hallar la policía 200 millones de bolívares (más de 60.000 euros a la tasa de referencia oficial) en efectivo en su vehículo.

La esposa de López -político que está en arresto domiciliario tras más de tres años en una prisión militar- denunció el caso como una maniobra de "la dictadura" para impedir que dé testimonio ante los mandatarios europeos de la crisis humanitaria y la persecución de los derechos humanos que a su juicio se produce en Venezuela.

La condena de la prohibición de salida a Tintori por parte de España y del resto de Gobiernos europeos que iban a recibirla ha llevado a la Cancillería venezolana a entregar una nota de protesta a los embajadores de estos países, a los que acusa de entrometerse en los asuntos internos de Venezuela por tomar esta posición.

EL CANCILLER VENEZOLANO ACUSA A RAJOY DE APOYAR LOS CRIMENES DE LA OPOSICIÓN

Por el contrario, el canciller venezolano, Jorge Arreaza, acusó hoy al jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, de agredir la "dignidad venezolana" y de apoyar los "crímenes de sus protegidos políticos de la derecha extremista venezolana", tras la reunión que el español sostuvo con directivos del Parlamento del país caribeño."Presidente @marianorajoy agrede la dignidad venezolana, representando el peor pasado colonial, derrotado y expulsado por nuestros Libertadores", dijo Arreaza en su cuenta de Twitter. Asimismo, indicó que "no es de extrañar que el Gobierno de la derecha española apoye los crímenes de sus protegidos políticos de la derecha extremista venezolana".