La participación en la quita de la deuda griega excede el 80 %, según varios medios

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grecia_9 |Telemadrid

El volumen de participación de los acreedores en la condonación voluntaria de la deuda griega supera ya el 80 por ciento del volumen de la deuda, aseguró hoy un portal informativo griego citando fuentes del registro electrónico en el que deben inscribirse quienes acudan al proceso de la quita.

Según el portal informativo In.gr, propiedad de un importante grupo mediático, los poseedores de 143.000 millones de euros de deuda griega se han inscrito ya en el registro, en un proceso que expira hoy a las 20.00 GMT. Esa cantidad supone el 80,79 % de los 177.000 millones de euros en deuda bajo soberanía griega de los 206.000 a reestructurar (el resto está inscrito bajo la ley británica y otras leyes de fuera de Grecia). "Los inversores se están apuntando en masa y de forma voluntaria al canje de bonos", declaró la fuente citada por In.gr.

Con estos números, el Gobierno griego no tendría obstáculos para iniciar el proceso de quita (para el que es necesario disponer de la aceptación del 66,7 % del volumen de deuda), y tampoco para activar el uso de las Cláusulas de Acción Colectiva (CAC), para las que se necesita el visto bueno de los tenedores del 75 % de deuda.

Estas CAC obligarían a los poseedores de bonos reacios a someterse a la quita de forma voluntaria a participar en ella, aunque afectaría de forma exclusiva a los 177.000 millones de euros bajo soberanía griega.

Sobre el resto del monto de la deuda a reestructurar decidirán los propios acreedores en las próximas semanas. Una vez realizado el cálculo de cuántos acreedores se suman a la quita, el Gobierno griego consultará el viernes con sus socios europeos si aplica las CAC. Esta operación implica el riesgo de que sea interpretada como un impago efectivo por parte de las agencias de calificación de riesgo, algo que activaría los seguros CDS que diversos inversores contrataron para proteger sus bonos ante un posible impago griego.

La reestructuración de esa enorme deuda significará la condonación de unos 107.000 millones de euros a través de un canje de los bonos actuales por otros depreciados algo más de la mitad de su valor.