Cinco personas han fallecido y ocho permanecen desaparecidas por las lluvias torrenciales que cayeron en las regiones de Liguria y Toscana (norte de Italia) ayer martes por la noche y que han provocado el desbordamiento del río Gravegnola.
La Policía ha encontrado a una mujer fallecida en su coche y ha recuperado el cuerpo de la quinta víctima. Asimismo, tres personas han muerto ahogadas en el municipio de Borghetto Vara.
La lluvia ha obligado a interrumpir el servicio ferroviario y a cortar varias autopistas, así como ha dejado incomunicados a varios municipios. Cinco puentes se han derrumbado y algunas instalaciones telefónicas han caído a causa del viento y la lluvia.
Alrededor de 300 personas han sido evacuadas en el municipio de Aulla y han sido trasladadas en el centro deportivo de Lunigiana. El departamento de la Protección civil ha activado la alerta en el norte de Italia, que se mantendrá durante este miércoles, principalmente en las zonas de Veneto y Friuli.