Al menos seis soldados han muerto en dos ataques suicidas en la capital de Afganistán, Kabul, y la ciudad de Kunduz, que fue visitada por la canciller alemana, Angela Merkel, a lo largo del sábado.
Dos insurgentes vestidos con chalecos forrados de explosivos han atacado un autobús que transportaba soldados afganos en la capital del país este domingo, matando al menos a uno, en el primer gran ataque en Kabul en los últimos siete meses, según informa Reuters.
Los atacantes abrieron fuego contra el autobús pero murieron antes de que pudieran detonar sus explosivos, según ha asegurado el subjefe de Policía de la ciudad, Jalilulah Dastyar. Un portavoz de los talibán se ha atribuido la responsabilidad del ataque.
En la ciudad de Kunduz, situada el norte del país, cinco soldados y policías afganos han muerto en un ataque perpetrado por tres terroristas suicidas.