Decenas de manifestantes han lanzado este sábado piedras y bombas incendiarias contra la sede de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela en el marco de las protestas convocadas por la oposición contra el Gobierno venezolano.
La Magistratura de Caracas ha señalado que los atacantes han prendido fuego a parte del mobiliario y han roto las vidrieras de la fachada, así como las vallas de la entrada principal. Según las autoridades, que han alertado de que la sucursal del Banco Provincial que se encuentra en la sede también ha sufrido daños, el incendio se encuentra bajo control.
El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Néstor Reverol, dijo hoy que la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) planea "iniciar una escalada terrorista" en el país caribeño mediante protestas antigubernamentales como las realizadas este sábado en Caracas y varias ciudades del interior.
Al menos 17 personas resultaron heridas tras las protestas antigubernamentales en Venezuela que se tornaron violentas en Caracas, informó el alcalde del municipio capitalino Chacao, el opositor Ramón Muchacho.
La oposición venezolana intentó por cuarta vez sin éxito en la última semana marchar hacia la Defensoría del Pueblo en el centro de Caracas, pero fue nuevamente reprimida por efectivos de la fuerza pública que usaron agua, perdigones y gas lacrimógeno para dispersarlos.
Asimismo, el dos veces candidato a la Presidencia de Venezuela, el opositor Henrique Capriles, aseguró que fue atacado "con bombas" cuando se encontraba en la sede de su partido, Primero Justicia (PJ), después de asistir a una protesta antigubernamental en la ciudad de Caracas. "URGENTE!!! Fuimos atacados con BOMBAS dentro del EDF! En este momento actúa BOMBEROS!", dijo Capriles en su cuenta de la red social Twitter. El dirigente opositor fue informado el viernes de que quedaba inhabilitado para ejercer cargos públicos por 15 años.
Miles de opositores intentaroneste sabado, por cuarta vez sin éxito en la última semana, marchar hacia la Defensoría del Pueblo en el oeste Caracas pero su acceso hacia allí fue impedido de nuevo por efectivos de la fuerza pública que usaron agua, perdigones de goma y gas lacrimógeno para dispersarlos.
"El propósito de esta repudiable acción no era otro que la búsqueda de la confrontación y la violencia entre venezolanos y con ello iniciar una escalada terrorista para atentar contra las instituciones del Estado democrático venezolano", prosiguió el titular de Interior.
Reverol aseguró que existe una "agenda violenta de agresión, perturbación y terrorismo" por parte de "grupos de derecha" que "siguen acariciando la vía del golpe de Estado como mecanismo para hacerse del poder político" y deponer al presidente, Nicolás Maduro.
Denunció también que varios periodistas que trabajan en medios estatales y alternativos "fueron agredidos físicamente destruyéndoles sus cámaras, medios de trabajo y teléfonos" cuando intentaban dar cobertura a una congregación de opositores en el municipio Chacao, un bastión del antichavismo.
"Todo ello bajo la complicidad de los convocantes de esta concentración violenta", sostuvo.
En este sentido, condenó el ataque que un grupo de encapuchados hizo hoy contra la Dirección Ejecutiva de la Magistratura, una instancia del Poder Judicial ubicada en Chacao, en la que "quemaron mobiliario, quebraron vidrios y reja de entrada", según indicó el organismo a través de la red social Twitter.
"Esta agresión fue planificada y dirigida por grupos que participaban en la concentración de la oposición, todos plenamente identificados, por lo que se le solicitará la aplicación de medidas judiciales correspondientes", aseveró el ministro.
Sin embargo, este hecho fue ampliamente repudiado por dirigentes opositores que se desmarcaron de estos "actos vandálicos", como el alcalde de Chacao, Ramón Muchacho, y el primer vicepresidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), Freddy Guevara.
Por último, Reverol felicitó a los efectivos policiales y militares que actuaron este sábado para contener las manifestaciones y aseguró que estos funcionarios "actuaron en estricto apego de los derechos humanos" y "evitaron que estos grupos de la derecha violenta y terrorista impusiesen sus planes antidemocráticos".