Las autoridades afirman que "lo peor de Irene ya ha pasado, pero aún es peligrosa"

Peligro de Irene
Peligro de Irene |Telemadrid

La Secretaria de Seguridad Nacional de EE.UU, Janet Napolitano, afirmó hoy que "lo peor de Irene ya ha pasado", pero remarcó que "todavía es potencialmente peligrosa" pese a que su categoría ha sido rebajada de huracán a tormenta tropical.

"No estamos todavía fuera de peligro", afirmó en rueda de prensa Napolitano, quien estaba acompañada por el director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), Craig Fugate.

Ambos funcionarios informaron que habían sostenido una conferencia telefónica con el presidente Barack Obama y miembros del gabinete presidencial para ofrecer los últimos datos acerca de Irene. Por su parte, Fugate instó a los ciudadanos a "permanecer dentro y seguros" en el interior de sus casas mientras los equipos encargados de reparar el suministro eléctrico trabajan para restablecer el servicio, que ha sido interrumpido en más de 4 millones de hogares de la costa este de EE.UU.

"Todavía persiste el peligro. Todavía tenemos árboles que se caen, intensas lluvias y fuertes vientos", agregó Fugate, quien explicó que la tormenta tropical ya había dejado atrás la ciudad de Nueva York, donde se han registrado algunas inundaciones y apagones eléctricos.

Napolitano reconoció la existencia de varios fallecidos a consecuencia del paso de Irene, que tocó tierra el sábado a primera hora en Carolina del Norte, pero eludió concretar una cifra exacta.

No obstante, los medios estadounidenses han indicado que las víctimas por el momento se elevan ya a 14, principalmente a causa de la caída de árboles y accidentes de tráfico provocados por las adversas condiciones meteorológicas.

La tormenta tropical Irene, que según el último informe del Centro Nacional de Huracanes avanza a 96 kilómetros por hora, se desplaza ahora hacia Nueva Inglaterra, donde se prevé que llegue esta tarde.

"Por favor, si están allí, quédense en casa", indicó Napolitano.

Asimismo, las autoridades recomendaron a los ciudadanos que dejen libres las carreteras desde Carolina del Norte (costa este central) hasta Maine (frontera con Canadá) para que los equipos de rescate puedan realizar sus trabajos de evaluación de desastre y eliminen los obstáculos.

"La líneas de electricidad y los árboles caídos, además de las inundaciones son los principales riesgos ahora", aseguró Napolitano.

Según una primera evaluación, los daños económicos ocasionados por Irene podrían situarse entre los 1.000 y 2.000 millones de dólares