La Torre Eiffel fue evacuada hoy por las fuerzas de seguridad por segunda vez en dos semanas tras una amenaza de bomba recibida desde una cabina telefónica, informaron fuentes policiales en París.
Un falso aviso de bomba el pasado día 14 provocó llevó a las fuerzas del orden a desalojar a unas 2.000 personas del monumento de pago más visitado del mundo.
La sociedad que gestiona comercialmente el monumento recibió una llamada anónima hacia las 16.40 GMT de hoy desde un teléfono público situado en el distrito siete de París, alertando de la colocación del supuesto explosivo, por lo que los artificieros se desplazaron hasta la emblemática torre.
Los aledaños del monumento se encontraban bloqueados por vehículos de las fuerzas de antidisturbios a las 18.00 GMT y se había desviado la circulación de la vía que pasa entre la torre y el cercano río Sena.
Francia se encuentra bajo una amenaza terrorista "real" y los servicios de inteligencia sospechan que puede producirse un "atentado inminente", según declaró el ministro del Interior, Brice Hortefeux, la semana pasada, al anunciar que se había elevado la alerta antiterrorista.
Además del desalojo de hoy y el del pasado día 14 de la Torre Eiffel, varias estaciones de tren también han sido desalojadas en los últimos días.
La estación de ferrocarril de Saint Lazare, en el centro de París, fue evacuada el lunes después de que se encontrase un paquete sospechoso.
Días antes, la estación de Versailles y la estación de Saint Michel, habían corrido la misma suerte.
Ninguno de los amenazas resultaron reales y no se conocen detenciones relacionadas con los falsos avisos.