Turquía derriba un cazabombardero ruso que habría violado su espacio aéreo

  • Putin acusa a Turquía de ser "cómplice del terrorismo"
  • Rusia niega haber violado el espacio aéreo turco

Helicópteros rusos comenzaron a sobrevolar una zona en el norte de Siria, fronteriza con Turquía, donde se precipitó el cazabombardero ruso Su-24, derribado por un caza F-16 turco, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

En un comunicado, la ONG aseguró que los helicópteros sobrevuelan el área de Yabal al Turkoman, vecina a la zona turca de Iskenderún, donde según su relato, se vio saltar a los tripulantes en paracaídas.

Sin embargo, en declaraciones a Efe por internet, el activista de la opositora Red Sham, Mohamed Muahad, afirmó que uno de los dos pilotos que viajaban en el aparato falleció, mientras que hay otro en paradero desconocido.

Esta fuente detalló que el avión ruso fue abatido por un misil disparado por la fuerza aérea turca tras adentrarse en territorio de Turquía.

Muahad agregó que el cazabombardero de Rusia se estrelló en el punto 45 de Yabal Turkoman en el lado de Kasab, bajo control del régimen sirio.

Por su parte, el Observatorio añadió que varios miembros de un equipo de corresponsales de medios de comunicación rusos que estaban cubriendo los acontecimientos en esa área resultaron heridos hoy por proyectiles disparados por facciones de tendencia islámica en el norte de Latakia.

En esa parte de la provincia, el Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, y otros grupos aliados arrebataron hoy a las fuerzas del régimen, que están respaldadas por la organización chií libanesa Hizbulá, el monte de Zahi, revelaron la ONG y Muahad.

El ministerio de Defensa de Rusia, reconoció hoy que la aviación turca abatió un bombardero ruso y que los pilotos lograron catapultarse del avión.

"El avión volaba a 6.000 metros de altitud. Se está precisando la suerte que corrieron los pilotos, que según datos preliminares, lograron abandonar el aparato", declaró el Ministerio de Defensa.

Moscú mantiene que el avión permaneció "todo el tiempo sobre el territorio de Siria", donde Rusia ofrece apoyo aéreo al régimen de Bachar al Asad, mientras que Ankara afirma que el Su-24 fue derribado porque violó su espacio aéreo y no hizo caso a diversas advertencias turcas.

Se trata del primer avión que pierde la agrupación de las Fuerzas Aeroespaciales rusas que bombardea posiciones de grupos terroristas en Siria, con el acuerdo del Gobierno de Damasco, desde el pasado 30 de septiembre.

Ankara ha denunciado varias violaciones de su espacio aéreo y advertido a Moscú que derribaría los aviones rusos que volvieran a entrar sin autorización en territorio turco.

Rusia reconoció los incidentes y los atribuyó a las malas condiciones meteorológicas en la zona y a que la base aérea de Hamimim, en la que están emplazados los aviones rusos, está a sólo unos 30 kilómetros de la frontera sirio-turca.

Turquía, que se opone a la operación militar rusa en Siria, ha pedido la imposición de una zona de exclusión aérea en territorio sirio contiguo a su frontera

PUTIN TACHA DE GOLPE A TRAICION DE TURQUIA EL DERRIBO DEL AVION

El presidente ruso, Vladímir Putin, acusó hoy a las autoridades turcas de ser "cómplices del terrorismo" por derribar el bombardero ruso Su-24 que cumplía misiones antiterroristas en Siria.

"Este suceso se sale de los marcos de la lucha contra el terrorismo. Pero la pérdida de hoy está vinculada con un golpe que nos han dado a traición cómplices del terrorismo", afirmó Putin al reunirse con el rey Abdalá II de Jordania en Sochi (mar Negro).

Putin destacó que el Su-24 "estaba en el aire cuando fue atacado a una altitud de 6.000 metros y a una distancia de un kilómetro de la frontera con Turquía", según recoge la prensa rusa.

"Nuestro avión fue derribado en territorio sirio por un cohete aire-aire disparado por un caza turco F-16", subrayó y precisó que "cayó a cuatro kilómetros de la frontera con Turquía".

Resaltó que los aviones rusos sobrevolaban hoy una zona montañosa del norte de la provincia de Latakia, "donde se concentran guerrilleros procedentes sobre todo de Rusia".

El líder ruso advirtió de que "este trágico acontecimiento tendrá graves consecuencias para las relaciones ruso-turcas" y criticó a Ankara porque, en vez de entablar contacto con Moscú, "la parte turca se dirigió a sus socios de la OTAN para abordar este incidente".

"Como si nosotros hubiéramos derribado un avión turco y no ellos uno nuestro", dijo Putin y se preguntó: "¿Quieren poner a la OTAN al servicio del Estado Islámico?".

El jefe del Kremlin aseguró: "Nunca permitiremos que se cometan crímenes como el de hoy".

Recordó que Turquía forma parte de la coalición antiterrorista encabezada por EEUU, país con el que Rusia ha suscrito un acuerdo "sobre la prevención de incidentes aéreos".

Putin subrayó que "hace tiempo" que ha "constatado el hecho de que hacia Turquía se dirige una gran cantidad de petróleo y derivados del crudo de los territorios ocupados en Siria".

Turquía, cuyo agregado militar en Moscú fue citado hoy por la Cancillería rusa, mantiene que el siniestrado avión ruso se encontraba en su espacio aéreo y sólo decidió derribarlo tras más de una decena de advertencias que sus pilotos ignoraron.

Por otra su parte, el Gobierno de Damasco calificó hoy de "agresión flagrante a la soberanía de Siria" el derribo de un avión ruso.

ERDOGAN LAMENTA EL DERRIBO DEL CAZA PERO ADVIERTE DE QUE DEFENDERA FRONTERAS

El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, lamentó hoy el derribo de un cazabombardero ruso por parte de dos F-16 turcos, pero aseguró que su país tiene el derecho a defender sus fronteras.

"Lamentamos estos hechos, que tuvieron lugar como consecuencia de unas normas de intervención qué habíamos declarado antes", dijo Erdogan durante un discurso en el palacio presidencial.

"Lo hicimos todo para evitar este último incidente, todo el mundo debe estar seguro de eso", agregó.

Y acto seguido subrayó: "Pero que nadie dude de que Turquía hará todo lo necesario para proteger su frontera".

LA OTAN INSTA A LA CALMA Y A REBAJAR LAS TENSIONES

Mientras, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, instó hoy a la calma y a rebajar tensiones después del derribo de un cazabombardero ruso por parte de Turquía por una supuesta violación de su espacio aéreo en la frontera sirio-turca, y dijo que los aliados confirman la versión de Ankara.

"Insto a la calma y la desescalada de tensiones", señaló Stoltenberg después de que se reuniera hoy el Consejo del Atlántico Norte, máximo órgano decisorio de la OTAN compuesto por los embajadores de los 28 aliados, a petición de Turquía por el incidente, que ha tensado las relaciones entre Moscú y Ankara.