Un total de 26 personas murieron hoy cuando asistían a un servicio dominical en un templo baptista de una pequeña localidad de Texas debido a los disparos que un hombre hizo en su interior con un rifle de asalto semiautomático. En una rueda de prensa en San Antonio, el gobernador de Texas, Greg Abbott, confirmó la cifra de víctimas mortales y dijo que el tiroteo ocurrido en el templo First Baptist Church, en Sutherland Springs, es "la peor matanza registrada en la historia del estado".