Suben a 282 los muertos y a 411 los desaparecidos en el seísmo de Indonesia

  • Elevan a 28 los muertos por la erupción del volcán Merapi

Las autoridades indonesias elevaron a 282 la cifra de muertos y a 411 la de desaparecidos tras el terremoto de 7,5 grados en la escala de Richter y el posterior tsunami que sacudió el martes la costa occidental de la isla de Sumatra. Según la Agencia Nacional de Gestión de Desastres, una decena de aldeas del archipiélago de las Mentawai fueron destruidas por el tsunami que desencadenó el seísmo con olas de hasta seis metros de altura que penetraron 600 metros en tierra.

"El número de muertos es actualmente de 282 y 411 personas están desparecidas", ha indicado el responsable de gestión de desastres de la provincia de Sumatra Occidental, Ade Edward. Según ha señalado, hasta las zonas afectadas, donde algunas localidades quedaron arrasadas por la ola gigante, están comenzando a llegar alimentos, mantas y tiendas de campaña, pero hay escasez de agua potable y eso aumenta el riesgo de enfermedades.

Fuentes de la gobernación de la provincia de Sumatra Occidental, las más afectada, solicitaron asistencia para los muchos damnificados que han perdido sus casas y se quedaron a la intemperie.

La Cruz Roja de Indonesia habla de al menos unos 2.000 desplazados y unos nueve barcos desaparecidos.

AL MENOS OCHO ESPAÑOLES

Cuando se produjo el tsunami, había al menos ocho españoles en la zona que se encuentran bien, según la Embajada de España en Yakarta.

Naciones Unidos envió hoy una misión para evaluar los daños y las necesidades de la población de las Mentawi, un archipiélago formado por unas 70 islas e islotes, con torno a 62.000 habitantes.

Entre los pueblos más dañados se encuentra el de Betumonga, en la isla de Pagai Utara, donde al menos el 89 por ciento de las viviendas, la mayoría de cañas de bambú, han sido destruidas o registrado daños. "Hay muchos desaparecidos y tememos que han muerto", dijo el jefe del centro de crisis, Mujianto, al canal de televisión Metro TV.

El epicentro del seísmo, cuyo desastre precedió a la erupción del volcán Merapi, en la isla de Java, fue localizado a 33 kilómetros de profundidad bajo el nivel del mar y 149 kilómetros al sur de la ciudad de Padang, capital de Sumatra Occidental. Durante las siguientes horas se sucedieron 14 réplicas de hasta 6,2 grados en la escala abierta de Richter.

La falla donde se produjo el terremoto es la misma que el 26 de diciembre de 2004 causó un sismo de 9,1 grados y luego un tsunami que destruyó localidades costeras de una docena de naciones bañadas por el océano Índico y causó 226.000 muertos. La ciudad de Padang, que como las islas Mentawi se asienta sobre un placa tectónica de gran actividad sísmica, fue el año pasado escenario de otro seísmo de 7,6 grados que causó más de 700 muertos.

Indonesia está situada sobre el llamado "Anillo de Fuego del Pacífico", una zona de gran actividad sísmica y volcánica que es sacudida por unos 7.000 temblores al año, la mayoría de escasa magnitud y que pasan desapercibidos para la población.

ELEVAN A 28 LOS MUERTOS POR LA ERUPCIÓN DEL VOLCÁN MERAPI

Paralelamente, las autoridades elevaron a 28 el número de muertos y a 91 los heridos por la erupción del volcán Merapi, en la isla de Java, según datos del Ministerio de Sanidad de Indonesia. La mayoría de los cadáveres recobrados están medio carbonizados, mientras que los heridos padecen problemas respiratorios y quemaduras.

Entre las víctimas mortales se encuentran un bebé de tres meses que murió de un problema respiratorio, un periodista y el guardián espiritual de la montaña, el respetado Mbah (abuelo) Maridjan, que falleció mientras rezaba para apaciguar el volcán en su casa de la aldea de Kinahrejo, a unos cuatro kilómetros del cráter.

Las operaciones de búsqueda de supervivientes se centran hoy en Kinanhrejo y Turgo, al sur del cráter. "Estas dos poblaciones son las más dañadas por la ceniza incandescente del volcán", señaló el comandante Aloysius Pramono, según la agencia estatal de noticias.

Militares, agentes policiales y funcionarios civiles protegidos de la ceniza con mascarillas blancas se encargan de la evacuación en camiones del Ejército y otros vehículos. Según el Ministerio de Sanidad, unas 18.000 personas están acogidas hasta la fecha en una docena de centros habilitados fuera del área peligrosa de diez kilómetros.

Las autoridades comenzaron el lunes la evacuación de unas 40.000 personas, después de que los vulcanólogos elevasen el nivel de alerta al máximo.