Uno de los dos detenidos en Bruselas en relación con los atentados de París asegura haber conducido el pasado sábado al presunto terrorista fugado Salah Abdeslam hasta el estadio Rey Balduino de Bruselas, en donde este martes debía jugarse un partido amistoso entre Bélgica y España que finalmente ha sido suspendido por el riesgo de atentado. Salah Abdeslam, de nacionalidad francesa pero nacido y crecido en Bruselas, es hermano de Brahim Abdeslam, uno de los yihadistas que se inmolaron en París, y de un tercer sospechoso, Mohamed, que fue detenido el fin de semana y puesto en libertad el lunes.