La Senado de Estados Unidos ha aprobado un plan presupuestario para financiar con 1,1 billones de dólares (unos 800.000 millones de euros) las actividades de la Administración federal hasta el 30 de septiembre, en un intento por evitar otro cierre de Gobierno como el vivido en 2013.
La medida, que pasó la votación de la Cámara de Representantes el miércoles, ha salido adelante con 72 votos a favor y 26 en contra, disipando para los próximos nueve meses la amenaza de otro cierre parcial de las operaciones gubernamentales. Ahora sólo faltaría la promulgación por parte del presidente, Barack Obama.
"La aprobación ha llegado con algo de retraso, pero hemos hecho el trabajo", ha asegurado este jueves la senadora Barbara Mikulski, quien lidera la Comisión de Gastos de la Cámara alta.
El plazo para aprobar esta dotación presupuestaria expira el sábado a medianoche. El presidente norteamericano ha emplazado en varias ocasiones al Congreso a dialogar para evitar situaciones como la vivida en octubre del año pasado, cuando el Gobierno federal tuvo que cancelar sus actividades no esenciales durante 16 días por falta de fondos.
En aquella ocasión, el foco de la disputa eran los fondos que la ampliación presupuestaria concedía a la reforma sanitaria impulsada por Obama. Las encuestas señalaron entonces a los republicanos como los más perjudicados por el 'cierre de Gobierno', el punto álgido de cuatro años de desencuentros en materia económica entre los dos partidos.