Honduras vivirá este domingo una reñida pugna entre la ex primera dama Xiomara Castro, cuya victoria podría significar también la vuelta entre bambalinas de su marido, Manuel Zelaya, y el presidente del Congreso, Juan Orlando Hernández, para llegar a la Presidencia. Una vez allí, la seguridad, la crisis económica y la lucha contra la pobreza marcarán la agenda del nuevo Gobierno.
Los últimos sondeos sobre intención de voto apuntan a una leve ventaja de Hernández sobre Castro, con el 28 y el 27 por ciento, respectivamente, aunque esta mínima diferencia servirá para decidir la victoria en un sistema electoral de una sola vuelta en el que el triunfo corresponde al candidato que supere con un solo voto a los demás aspirantes.
OTROS CANDIDATOS
Además de Castro y Hernández, también compiten Mauricio Villeda, del Partido Liberal (PL); Orle Solís, del Partido Democracia Cristiana (PDC); y Romeo Vásquez, de Alianza Patriótica (AP), como representantes del centro-derecha; Jorge Aguilar, del Partido Innovación y Unidad (PINU); y Andrés Pavón, del Frente Amplio Político Electoral de Resistencia (FAPER), como abanderados de la izquierda; y Salvador Nasralla, del Partido Anticorrupción (PAC), de centro.
Unos 5,3 de los 8,5 millones de hondureños están llamados a las urnas para elegir, además de presidente, a los 128 diputados del Congreso Nacional, a 20 del Parlamento Centroamericano y 298 cargos municipales.
Para ello, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) ha instalado 16.094 urnas en 5.437 mesas repartidas por todo el territorio nacional y en 40 ubicadas en las ciudades estadounidenses de Washington, Nueva York, Houston, Miami, Atlanta y Nueva Orleans.
Unos 15.750 observadores velarán por la transparencia del proceso electoral. El TSE ha pedido a los 750 extranjeros, procedentes de Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), que respeten la soberanía nacional de Honduras, recordándoles que "solo están para acompañar".