Un tribunal de Dublín ordenó hoy a una familia irlandesa pagar una compensación de casi 10.000 euros a una niñera española que denunció la explotación que sufren algunas trabajadoras de este sector en la República de Irlanda.
La decisión adoptada por la Comisión de Relaciones Laborales (WRC), sin precedentes en Irlanda, ayudará a que las au pair dejen de ser "explotadas" y consideradas como "mano de obra barata", destacó hoy través de su abogado la joven, quien ha preferido mantener su anonimato.
La WRC compensó a la niñera con 9.229 euros tras demostrarse que la citada familia, cuya identidad tampoco ha sido divulgada, infringió la Ley de Salario Mínimo, de Organización del Horario Laboral y Condiciones de Empleo (2000) al pagarle solo 100 euros semanales.
Desde el 1 de enero de este año el salario mínimo en Irlanda está fijado en los 9,15 euros a la hora.
Este caso ha sido gestionado, en nombre de la joven, por el Centro de Derechos de los Inmigrantes (MRCI), entidad que celebró hoy el hecho de que la sentencia sentará a partir ahora jurisprudencia.
La niñera explicó en una nota difundida por el CRCI que se sintió "agotada, deprimida y débil" cuando decidió meses atrás buscar ayuda para denunciar su situación laboral.
"Ha sido un proceso largo y mucha gente ha trabajado en mi caso. Por fin he recibido la recompensa y el respecto que necesitaba. Sin toda esa gente, esto no hubiese sido posible", indicó la au pair.
Por esos motivos, quiso mandar en el texto un mensaje a todas sus compañeras en esta profesión: "Merecéis que se os respete porque lo más valioso de una familia, sus hijos, están a vuestro cargo. Y esta es una enorme responsabilidad".
"Me gustaría recalcar la gran importancia que tiene que todo el mundo reconozca esta situación y espero que las au pairs no vuelvan a ser explotadas como mano de obra barata", agregó.
El Centro de Derechos de los Inmigrantes aseguró hoy que la sentencia judicial "envía un claro mensaje" a las familias que emplean niñeras, al tiempo que advirtió de que, "por desgracia", este no es "un caso aislado".
"Sabemos que muchas au pairs reciben un trato mucho, mucho peor. Su trabajo es esencial para las familias, la comunidad y la economía. Esta decisión histórica, así como la compensación concedida, demuestra claramente que se valora su trabajo", apuntó la representante legal del CRCI, Virginija Petrauskaite.
La activista instó al Gobierno a lanzar una campaña de concienciación para que las familias conozcan sus derechos y responsabilidades.
Pero sobre todo, puntualizó, las autoridades deben "acabar urgentemente" con las "agencias de au pairs que anuncian condiciones laborales ilegales tanto a los que dan empleo y como a los empleados".
El pasado año, el CRCI publicó un informe en el que aseguraba que ahora presta apoyo legal a unas 1.000 niñeras, desde los 40 casos que tuvo en 2012.
En aquel texto denunció la "extendida explotación" que sufren las au pair que "ofrecen cuidado a menores a tiempo completo y flexible en hogares de todo el país por una fracción del salario mínimo".
El documento constató que el 37 % de las 554 niñeras encuestadas no tenía contratos y un 40 % tenía solo uno verbal, mientras que al 58 % se le pagaba 120 euros semanales o menos.
El 48 % de las niñeras era de nacionalidad brasileña y el 28 % española.