El nuevo primer ministro libio, Abderrahim al Kib, salió ileso de un intento de asesinato perpetrado en Trípoli por un grupo de hombres desconocidos durante un acto oficial, dijeron hoy a Efe fuentes cercanas a las autoridades libias.
El ataque se produjo el sábado cuando el primer ministro se encontraba realizando una visita junto a una delegación del Ejecutivo a la sede de la radio estatal libia en el barrio de Ashat, en la periferia de la capital.
En el momento en el que Al Kib entraba en el edificio, un grupo de hombres disparó contra la delegación y causó la muerte de dos acompañantes del primer ministro, mientras que otros cinco resultaron heridos, explicaron las mismas fuentes.
En el atentado, Al Kib resultó ileso y dos agresores fueron detenidos, aunque se desconoce aún su identidad y su filiación.
Las fuentes, que prefirieron mantener el anonimato por razones de seguridad, afirmaron que el ataque fue perpetrado por integrantes de lo que denominó la "quinta columna", en referencia a supuestos hombres fieles al difunto dictador Muamar el Gadafi.
El atentado se produce sólo tres días después del anuncio del nuevo Ejecutivo elegido por Al Kib y que ha sido criticado por algunos grupos y tribus, ya que exigen una mayor representación en el actual gabinete.
HOMBRES ARMADOS BLOQUEAN UN AEROPUERTO CERCANO A TRÍPOLI
Varias decenas de hombres armados mantienen bloqueado el aeropuerto internacional de Maetiqa, cercano a Trípoli, hecho que ha obligado a la aerolínea tunecina "Tunisair" que opera en él a cancelar su actividad, informaron a Efe fuentes próximas a las autoridades de transición libias.
Al parecer, los pistoleros son originarios de la ciudad de Bani Walid, una de las últimas en ser conquistada por los rebeldes libios durante la guerra civil que meses atrás causó la caída del ex hombre fuerte de país, coronel Muamar Gadafi.
Con su acción, los hombres armados, que asaltaron el sábado el aeródromo, querrían protestar por el castigo que sufrió su ciudad, en la que se atrincheraron durante semanas fuerzas leales al asesinado dictador.
Tres días después de que fuera presentado el cadáver de Gadafi, muerto a manos de los milicianos el pasado 20 de octubre, fuerzas rebeldes irrumpieron en la referida localidad en busca de leales al antiguo régimen, acción que acabó en un combate que causó la muerte a 13 habitantes de Bani Walid y 10 milicianos.
La población acusó entonces a las fuerzas rebeldes de haber asesinado a los civiles en represalia por la resistencia que durante meses ofreció esta localidad situada en pleno desierto, situada a unos 150 kilómetros al suroeste de Trípoli.
La ocupación del aeropuerto obligó el sábado a la aerolínea de bandera tunecina a cancelar un vuelo ya fletado con medio centenar de pasajeros a bordo.
Este domingo, Tunisair confirmaba que suspendía sus operaciones "de forma provisional" en Maetiqa hasta que el conflicto se resuelva y sean desalojados los hombres armados del aeródromo, que en tiempos de Gadafi solo era usado operaciones militares.