La Policía tailandesa ha empleado este lunes y por segundo día consecutivo gases lacrimógenos y bombas de humo para repeler a los manifestantes que pretendían tomar la Casa de Gobierno, sede del Ejecutivo tailandés, y la Comisaría Central de la capital.
Los enfrentamientos han ocurrido esta mañana cerca de las barricadas levantadas en el puente de Chamai Maruchet, que conduce a la Casa de Gobierno desde la plaza Rajadamnoen, lugar de reunión de los manifestantes de la oposición, informa el diario tailandés 'The Nation' en su edición digital.
Muchos de los manifestantes huyeron y volvieron a la primera línea después de echarse cubos de agua por encima y con gabardinas y bolsas de plástico en la cabeza para protegerse de los gases.
Este lunes se han desplegado por primera vez médicos militares para atender a los afectados por los gases lacrimógenos y se han extendido las noticias sobre la utilización de balas de goma.