El Papa invita a la diplomacia internacional a luchar contra la pobreza material y espiritual

El Papa Francisco ha invitado al cuerpo diplomático ante la Santa Sede a luchar "contra la pobreza, tanto material como espiritual, edificar la paz y construir puentes", durante la audiencia mantenida este viernes con miembros del cuerpo diplomático acreditados ante la Santa Sede en la Sala Regia del Palacio Apostólico.

Después del saludo del decano del cuerpo diplomático, el embajador del principado de Mónaco ante la Santa Sede, Jean-Claude Michel, el Papa Francisco ha agradecido e intercambiado los saludos y ha enviado un "abrazo del Papa al mundo" para llegar a través de los diplomáticos a cada uno de sus conciudadanos, "con todas sus alegrías, sus dramas, sus esperanzas, sus deseos".

Asimismo, el Pontífice ha recordado que "las relaciones que los países mantienen con la Santa Sede son beneficiosas y son verdaderamente una ocasión de bien para la humanidad" porque ha añadido que "precisamente lo que preocupa a la Santa Sede es el bien de todo hombre en esta tierra" y que con esta idea comienza el Obispo de Roma su ministerio, "sabiendo que puede contar con la amistad y el afecto de los Países que representan, y con la certeza de que comparten este propósito".

Por otro lado, el Papa Francisco ha señalado que también espera "emprender un camino con los pocos Países que todavía no tienen relaciones diplomáticas con la Santa Sede, algunos de los cuales - ha agradecido de corazón - han querido estar presentes en la Misa por el inicio de mi ministerio, o enviado mensajes como gesto de cercanía".

Además, el Papa ha explicado de nuevo por qué ha elegido el nombre de Francisco, pensando en Francisco de Asís, no sólo para "aprender a amar cada vez más a la Tierra, que es un camino difícil", sino también porque el nombre de Francisco "enseña un profundo respeto por toda la creación, la salvaguardia del medio ambiente, que demasiadas veces no se usa para el bien, sino que se explota ávidamente, perjudicando unos a otros".

El Pontífice también ha destacado el amor que Francisco de Asís tenía por los pobres, por lo que "la Iglesia ha tratado siempre de cuidar proteger en todos los rincones de la Tierra a los que sufren por la indigencia" y ha agregado que considera que en muchos países es posible "constatar la generosa obra de aquellos cristianos que se esfuerzan por ayudar a los enfermos, a los huérfanos, a quienes no tienen hogar y a todos los marginados, y que, de este modo, trabajan para construir una sociedad más humana y más justa".

DICTADURA DEL RELATIVISMO

Pero, el Papa Francisco ha remarcado que, además de la material hay otra pobreza que es la pobreza espiritual "que afecta gravemente también a los países considerados más ricos" y en esta línea, ha recordado a su predecesor que denunciaba la "dictadura del relativismo", que deja a cada uno como medida de así mismo y pone en peligro la convivencia entre los hombres".

Además, el Pontífice ha recordado que Francisco de Asís invita a "construir la paz" pero ha señalado que "no hay verdadera paz sin verdad" y que "no puede haber verdadera paz si cada uno es la medida de sí mismo, si cada uno puede reclamar siempre y sólo su propio derecho, sin preocuparse al mismo tiempo del bien de los demás, de todos, a partir ya de la naturaleza, que acomoda a todo ser humano en esta tierra".

En este sentido, ha recordado que uno de los títulos del Obispo de Roma es 'Pontífice', es decir, "el que construye puentes, con Dios y entre los hombres" por lo que ha manifestado querer precisamente que el diálogo "ayude a construir puentes entre todos los hombres, de modo que cada uno pueda encontrar en el otro no un enemigo, no un contendiente, sino un hermano para acogerlo y abrazarlo" para "crear ámbitos reales de auténtica fraternidad".

Así, el Papa Francisco ha remarcado que "en esta tarea es fundamental también el papel de la religión" porque "en efecto, no se pueden construir puentes entre los hombres olvidándose de Dios. Pero también ha asegurado que es cierto lo contrario: "no se pueden vivir auténticas relaciones con Dios ignorando a los demás". Por eso, considera importante intensificar el diálogo entre las distintas religiones" y ha destacado que "en primer lugar con el Islam" por lo que ha indicado que ha apreciado "mucho la presencia, durante la Misa de inicio de su ministerio, de tantas autoridades civiles y religiosas del mundo islámico".

Además, el Pontífice ha resaltado que "también es importante intensificar la relación con lo no creyentes, para que nunca prevalezcan las diferencias que separan y laceran, sino que, pese a la diversidad, predomine el deseo de construir lazos verdaderos de amistad entre todos los pueblos".

Al finalizar su discurso de la audiencia en la que los diplomáticos han estado sentados en círculo y no en filas, el Papa ha agradecido de nuevo el trabajo que desarrollan junto con la Secretaría de Estado para "edificar la paz y construir puentes de amistad y hermandad" y ha reiterado su agradecimiento a los Gobiernos que han participado en las celebraciones con motivo de su elección, "con la esperanza de un trabajo común fructífero". Al concluir, el Papa Francisco ha saludado a cada uno de los participantes.