Osetia del Sur anuncia su intención de integrarse en Rusia

  • Esta región secesionista de Georgia sigue el camino abierto por Crimea en 2014
  • Rusia reconoció la independencia de las regiones georgianas de Abjasia y Osetia en 2008
El presidente de Osetia del Sur, Anatoly Bibílov, en la toma de posesión de Nicolás Maduro
El presidente de Osetia del Sur, Anatoly Bibílov, en la toma de posesión de Nicolás Maduro |TWITTER

La república separatista georgiana de Osetia del Sur anunció este miércoles que "en breve" dará pasos para integrarse en Rusia, que reconoció su independencia en 2008 tras una corta pero cruenta guerra con Georgia.

"Creo que unirse con Rusia es nuestro objetivo estratégico. Nuestro camino. El anhelo de nuestro pueblo", dijo el líder suroseta, Anatoli Bibílov, en una declaración difundida por el servicio de prensa del partido oficialista ruso, Rusia Unida.

Bibílov agregó que Osetia del Sur "seguirá ese camino" y dará pronto "los pasos jurídicos correspondientes" para formar parte de Rusia, su "patria histórica".

"El objetivo es que (ambas Osetias) formemos parte del mismo Estado. Y ese Estado es Rusia"

Recalcó que el pueblo suroseta "está dividido", en alusión a Osetia del Norte, región de la Federación Rusa."El objetivo es que (ambas Osetias) formemos parte del mismo Estado. Y ese Estado es Rusia", insistió.

Bibílov subrayó que el pueblo suroseta había señalado "en varias ocasiones" que ese es su objetivo, pero "dejó escapar" esa oportunidad en 2014, cuando la anexionada península ucraniana de Crimea votó en un referéndum a favor del ingreso en Rusia.

El reconocimiento ruso de Abjasia y Osetia del Sur fue secundado también por Venezuela, Nicaragua, Nauru y Siria, pero condenado mayoritariamente por la comunidad internacional

Rusia reconoció la independencia de las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur el 26 de agosto de 2008, dos semanas después de que se firmara el acuerdo para poner fin al breve, pero cruento conflicto en Osetia del Sur, que terminó con una rotunda derrota de Georgia.

El reconocimiento ruso fue secundado también por Venezuela, Nicaragua, Nauru y Siria, pero condenado mayoritariamente por la comunidad internacional.