La canciller alemana, Angela Merkel, celebró hoy el "sí" de los socialdemócratas a emprender negociaciones con su partido para una nueva gran coalición de Gobierno, que auguró que serán "intensas".
"Nos queda mucho trabajo por delante", señaló la canciller en una breve comparecencia en la sede de la Unión Cristianodemócrata (CDU) en Berlín, después de que un congreso extraordinario del Partido Socialdemócrata (SPD) diera luz verde por estrecho margen al inicio de las conversaciones.
Merkel confió en que las reuniones se desarrollen en un clima de "sensatez", a pesar de las "discrepancias" en cuanto a los contenidos, y señaló que el preacuerdo alcanzado el 12 de enero será "el marco" para consensuar las políticas de un futuro Gobierno alemán.
"Para nosotros es importante en estas negociaciones que Alemania tenga un Gobierno estable que pueda afrontar las preguntas de futuro y buscarles solución", manifestó la canciller.
Entre los principales objetivos, situó el impulso de la economía, la digitalización, la justicia social y la seguridad.
Merkel se mostró satisfecha con el aval del SPD a las conversaciones tras "intensas y controvertidas discusiones" y avanzó que mañana los partidos se reunirán para fijar la hoja de ruta del proceso negociador, que debería comenzar "muy rápido".