El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, reconoció hoy que las diferencias políticas propiciaron "un ambiente adecuado" para el actual conflicto, pero aseguró que derrotarán al terrorismo y que sus tropas solo sufrieron "un revés".En un discurso televisado a la nación, Al Maliki volvió a atribuir la actual situación a una conspiración tejida por el yihadista Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) y miembros del disuelto partido único Baaz, que dirigía el fallecido dictador Sadam Husein.