Los cadáveres de nueve personas fueron hallados hoy colgados de un puente en la ciudad de Nuevo Laredo, en el noreste de México, y con señales de haber sido torturados, informaron a Efe fuentes oficiales.
Las víctimas, cinco hombres y cuatro mujeres, llevaban los ojos vendados y presentaban huellas de tortura, declaró una fuente de la Alcaldía de esa urbe, fronteriza con Estados Unidos.
Supuestos miembros de la organización criminal de Los Zetas se atribuyeron los asesinatos de las nueve personas, que calificaron como miembros del Cártel del Golfo y a las que acusaron de atraer la atención de las fuerzas de seguridad con atentados.