Escenario de interminables discursos de Fidel, una desbordada Plaza de la Revolución acogió hoy el acto de despedida al comandante. El eco de su voz, su verbo torrencial y su arenga revolucionaria resonaron en las emotivas palabras que le dedicaron los dignatarios invitados de países de todo el mundo. Miles de personas abarrotaron la plaza y las calles de alrededor: rostros contenidos, algunas lágrimas, banderas y carteles para el último adiós a Fidel Castro en la que fue su plaza, testigo de las celebraciones más importantes de la Cuba castrista.