El presidente del Consejo Nacional Sirio (CNS), Abdul Baset Seida, ha reclamado hoy a la comunidad internacional que arme a los rebeldes al régimen de Bachar al Asad para que puedan defender a la población civil, tras reunirse en Madrid con el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo. En una rueda de prensa conjunta, García-Margallo ha recalcado que España desplegará todos los esfuerzos para lograr la caída del régimen de Al Asad -"no puede seguir ni un minuto más, aunque sólo sea por razones humanitarias", ha indicado- aunque ha advertido que no puede traducirse en un vacío de poder que pudiese ser utilizado por facciones violentas o extremistas.
El presidente del Consejo Nacional Sirio ha explicado que el régimen de Bachar al Asad emplea "todo tipo de armas" contra la población siria y ha reclamado una intervención de la comunidad internacional. "Lo vamos a decir claramente: estamos solicitando una intervención militar para la protección de los civiles sirios que hace año y medio que están siendo asesinados", ha manifestado.
Ha insistido en que la comunidad internacional tiene que proveer a los sirios "de todos los medios que les permitan defenderse" y, en ese contexto, ha mencionado las armas "que permitan la defensa contra la artillería, los blindados y los aviones que están matando a los sirios a todas horas".
El presidente del Consejo Nacional Sirio ha recordado que en su país hay más de tres millones de desplazados y un cuarto de millón de refugiados, que se han producido más de 30.000 muertos, y que hay más de cien mil personas detenidas, además de "decenas de miles" de heridos y desaparecidos.
Ha instado a la UE a "mirar hacia Rusia" para que este país cambie su postura hacia Siria pero ha recalcado que la situación obliga ya a actuar fuera del ámbito del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Abdul Baset Saida ha señalado que el Consejo Nacional Sirio llevará a cabo un proceso de diálogo nacional para integrar a todas las facciones políticas, religiosas y étnicas en la transición, salvo a aquellos que "tengan las manos manchadas de sangre de inocentes".
Ha agradecido por último el apoyo de España expresado por García-Margallo y ha señalado que la oposición siria confía en la ayuda de un país que conoce bien y que superó las dificultades de la transición de la democracia. Preguntado por si España se plantea reconocer al Consejo Nacional Sirio, el ministro de Asuntos Exteriores ha recalcado que el Gobierno, como toda la comunidad internacional, tiene el "máximo interés" en que haya un interlocutor "único y legítimo, que sea la voz del pueblo sirio", aunque ha recalcado que es una decisión que deben adoptar conjuntamente todos los países de la UE.
García-Margallo ha abogado por un Consejo Nacional Sirio "inclusivo", "representativo", que amplíe su ámbito de actuación y respete los derechos y libertades básicas, las minorías religiosas y étnicas y los derechos de la mujer. "En esas condiciones, España abogaría en el seno de la UE por el reconocimiento del Consejo Nacional Sirio", ha asegurado el ministro, quien ha transmitido al presidente del CNS la preocupación del Gobierno por la unidad de la oposición siria y ante el que ha avanzado que España hará "todos los esfuerzos" para aumentar los 400.000 euros de ayuda humanitaria que ya ha destinado a Siria.
"El pueblo español contempla con horror las matanzas", ha aseverado García-Margallo quien ha añadido que España desea participar en la construcción de una Siria libre y democrática, que integre a todos, con exclusión de aquellos que "opten por la violencia".
El representante de la oposición siria se ha referido asimismo a la reunión que el Consejo Nacional Sirio ha celebrado recientemente en Estocolmo, en la que acordó celebrar una sesión plenaria a finales de mes o principios de octubre, en la que se reformará su estructura. Ha recordado que el Consejo Nacional Sirio es ahora un "mosaico de facciones" en el que están árabes, kurdos, sirios, musulmanes o cristianos, aunque es aún "un proyecto nacional incompleto".