El presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, el republicano John Boehner, ha roto sus conversaciones con el presidente norteamericano, Barack Obama, y ha señalado que comenzará a negociar con los líderes del Senado con la intención de resolver el problema de la deuda antes de la fecha límite, el 2 de agosto, para evitar el primer 'default' de la historia del país.
En una carta dirigida a sus colegas del Congreso, Boehner ha afirmado que las conversaciones con Obama han sido "estériles", refiriéndose a las demandas del mandatario estadounidense para elevar los impuestos. "El presidente ha sido enfático en cuanto a que los impuestos han de elevarse", ha dicho Boehner en su carta. "Como ex pequeño empresario, sé que los impuestos destruyen puestos de trabajo", ha agregado.
El anuncio de Boehner ha llegado un día después de los informes que indicaban que él y Obama estaban cerca de llegar a un acuerdo a diez años para un recorte de 3.000 billones de dólares (2.090 billones de euros) que habría irritado a los demócratas. En este sentido, los demócratas criticaron que el acuerdo no incluía garantías sobre ingresos adicionales a través de impuesto y que forzaría a mayores recortes en los programas públicos.
La respuesta de Obama
El presidente de Estados Unidos ha criticado duramente al presidente de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, el republicano John Boehner, poco después de que éste abandonara las negociaciones sobre el límite de la deuda y ha afirmado que "ya no queda tiempo" para alcanzar un acuerdo.
Pese a ello, se ha mostrado confiado en que el plazo para evitar el 'default' (suspensión de pagos) --que finaliza el 2 de agosto-- se extenderá. Obama ha recalcado que la propuesta que ha colocado sobre la mesa era "un acuerdo extraordinariamente justo" y ha convocado a Bohener; al líder del Senado, el demócrata Harry Reid; al líder de la minoría en el Senado, Mitch McConell y a la líder de la minoría del Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, a una reunión en la Casa Blanca este sábado para que "expliquen cuál es la manera en la que se va a evitar el 'default'".
El presidente ha indicado que las conversaciones se han roto a causa de los impuestos, pero que ambas partes estaban a unos 10.000 millones de dólares (6.966 millones de euros) de alcanzar el consenso. "Parece que no tienen capacidad (los republicanos) para acordar sobre el límite de la deuda", ha apostillado Obama.
Por su parte, Reid ha afirmado, a través de su portavoz, que no está interesado en negociar una reducción de déficit a corto plazo y que quiere que se acuerde un paquete económico a largo plazo "El senador Reid no no pactará un acuerdo a corto plazo y creemos que la Casa Blanca no lo va a firmar", ha señalado Adam Jentleson.
Asimismo, Reid ha señalado a través de un comunicado que Estados Unidos no puede entrar en suspensión de pago y ha indicado que está preparado para comenzar negociaciones bipartidistas. "Debemos evitar el 'default' a cueste lo que cueste, por lo que es tiempo de iniciar de nuevo conversaciones entre los dos grandes partidos para llegar a un acuerdo que al menos satisfaga este objetivo", reza el texto