Felipe VI y el presidente chino, Xi Jinping, expresaron hoy su deseo de mejorar aún más la relación estratégica que mantienen ambos países desde hace algo más de una década y de ampliar la cooperación en diferentes terrenos desde el "respeto mutuo". El Rey se reunió hoy con Xi en un hotel de Astaná a su llegada a la capital de Kazajistán para participar esta tarde en la inauguración de la exposición internacional, titulada "La energía del futuro", junto con varios mandatarios extranjeros.
En su primer encuentro con el presidente chino desde su proclamación como rey en junio de 2014, don Felipe le invitó a viajar a España "en un futuro próximo" para fortalecer el intercambio de visitas de alto nivel. "Quisiéramos, en el apartado bilateral, que haya un gran lanzamiento de esa relación estratégica que establecimos hace unos años", dijo Felipe VI en el breve discurso pronunciado al comienzo de la reunión, que se prolongó durante unos 40 minutos.
Xi aseguró que concede "suma importancia" a la relación con España, por lo que se mostró dispuesto a trabajar junto con el Rey para "elevar la asociación estratégica integral hacia un nivel más elevado en mayor beneficio de los dos países y sus pueblos". Se trata de la primera ocasión en la que el Rey se entrevista con Xi, aunque ambos se conocieron en agosto de 2008, como príncipe y vicepresidente chino, respectivamente, durante la inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín.
Acompañado del ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, el monarca español subrayó que la relación con el país asiático está basada en "el respeto mutuo, el afecto y la admiración". "Para mí, es un privilegio tener esta oportunidad de encontrarnos en este momento (...) Me permite poner de manifiesto la trayectoria tan fructífera de relaciones que hemos tenido a lo largo de estos últimos años", se congratuló Felipe VI.
A su juicio, ha sido una "constante" en ambos gobiernos "trabajar para contribuir al mayor bienestar de los pueblos y a incrementar el nivel y la calidad de los intercambios comerciales, políticos y culturales".
Don Felipe se felicitó del resultado de la cumbre celebrada entre la UE y China el pasado día 2 en la que se reivindicaron como firmes defensores de los acuerdos contra el cambio climático después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciara la decisión de retirar a su país del pacto firmado en París.
La cumbre entre la UE y China puso de relieve "signos muy positivos de pasos adelante en cuanto a mayor confianza, mayor transparencia y mayor apertura", según el jefe del Estado español, quien recordó que España está "muy en línea" con la política europea. Don Felipe expresó el "enorme placer" que supondría la visita de Xi a España una vez que se celebre en otoño el XIX Congreso del Partido Comunista de China (PCCh).
El mandatario chino, al frente de la potencia asiática desde 2013, elogió el papel "relevante" que la Familia Real española ha desempeñado siempre para promover con "firmeza" la buena amistad entre los dos países. Después de transmitirle su "cordial saludo y mejores votos" al rey Juan Carlos, Xi valoró que cada vez esté "más consolidada la confianza mutua política, con fructíferos resultados" en la cooperación bilateral.
El líder comunista recordó la breve escala que el pasado mes de noviembre hizo en Gran Canaria, donde se entrevistó con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría. "Es un lugar sumamente lindo que me dejó gratamente impresionado por la historia milenaria, la cultura fascinante y los pintorescos paisajes. Somos países de civilizaciones antiguas", destacó Xi.
La reunión entre don Felipe y Xi da continuidad a los contactos de alto nivel mantenidos en los últimos meses, que han apuntalado la buena sintonía política y económica entre ambos países. El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, se vio con el presidente chino el pasado 13 de mayo en Pekín con motivo del foro económico sobre la Nueva Ruta de la Seda promovido por el régimen comunista para promover proyectos de infraestructuras en esta conexión entre Asia y Europa.
Rajoy también se vio con Xi en la cumbre del G20 celebrada en la ciudad china de Hangzhou en septiembre del pasado año.
En las dos ocasiones, y como ha hecho hoy el Rey, el jefe del Ejecutivo animó al líder comunista a viajar España y éste, a su vez, cursó una invitación a Felipe VI para visitar Pekín. La cita con el presidente chino es el encuentro de más calado que don Felipe va a mantener durante su estancia en Kazajistán, con cuyo mandatario, Nursultán Nazarbáyev, se verá mañana, sábado, en el palacio presidencial en Astaná.
Esta tarde, el Rey se entrevistará con el secretario general de la ONU, el portugués António Guterres, y con el presidente de Uzbekistán, Shavkat Mirziyoyev, otro de los países centroasiáticos en los que España tiene intereses empresariales.
Con motivo de la inauguración de la Expo de Astaná, alrededor de una quincena de jefes de Estado y de Gobierno se han desplazado a la capital de la exrepública soviética.
Entre ellos está el presidente ruso, Vladímir Putin, con quien don Felipe no se ha visto desde que es rey, aunque han conversado en diversas ocasiones, y el primer ministro indio, Narendra Modi, con quien se reunió la semana pasada en Madrid.