Felipe y Matilde de Bélgica dan la bienvenida a Bruselas a los Reyes de España

  • Felipe VI pide en Bruselas reforzar integración de UE y cercanía a ciudadanos

El Rey de España coincidió hoy con las autoridades belgas, durante la primera visita oficial a Bélgica de Felipe VI y la Reina Letizia, en la necesidad de impulsar todos los procesos de integración pendientes en la UE y mejorar la conexión de los ciudadanos con las instituciones europeas.

Don Felipe y doña Letizia completaron con un almuerzo en el Palacio Real de Bruselas, ofrecido por los reyes de los belgas, el programa oficial de esta visita, que permitió al monarca español abordar diversas cuestiones bilaterales y comunitarias con los máximos representantes del Gobierno y el Parlamento Federal del país anfitrión.

REUNIÓN CON EL PRIMER MINISTRO

Así, en la reunión que celebraron Felipe VI y doña Letizia en el Palacio Egmont con el primer ministro belga, Charles Michel, y el titular de Exteriores, Didier Reynders, el Rey y sus interlocutores comprobaron el "magnífico" estado de las relaciones entre ambos países y abogaron por reforzar la cooperación económica, cultural y en la lucha contra todo tipo de terrorismo.

Según explicaron fuentes de la Casa del Rey española, también examinaron la colaboración hispano-belga como socios en la UE y la OTAN y, en este contexto, compartieron la importancia de trabajar para reforzar las instituciones comunitarias y mejorar su conexión con los ciudadanos de la Unión.

Además, coincidieron en mostrar su preocupación por los efectos de la crisis económica en la UE, especialmente el desempleo y, en particular, el paro juvenil.

VISITA A LAS CÁMARAS LEGISLATIVAS

Tras este encuentro, los Reyes de España fueron recibidos por los presidentes de la Cámara de Representantes, Siegfried Bracke, y del Senado, Christine Defraigne, en la sede del Parlamento Federal, donde el Rey, a preguntas de los periodistas, valoró como muy positivo el resultado de esta visita oficial y también el de la que realizaron ayer a Luxemburgo, invitados por los Grandes Duques.

Don Felipe añadió que doña Letizia y él estaban "muy agradecidos por la hospitalidad" que habían demostrado los Reyes y los demás representantes institucionales belgas que les habían recibido hoy en Bruselas.

Además de visitar los hemiciclos de ambas Cámaras y firmar en sus respectivos libros de honor, el monarca español y su esposa mantuvieron un encuentro en el Salón Rojo del Senado con Bracke y Defraigne, quien aprovechó además para mostrarles el busto dedicado en una galería al marqués de Villalobar, un diplomático español a quien los belgas recuerdan con gran afecto desde hace ya cien años.

Rodrigo de Saavedra y Vinent, segundo marqués de Villalobar, fue jefe de la legación española en Bruselas desde 1913, un año antes del estallido de la Primera Guerra Mundial, hasta 1918, cuando la representación fue elevada al rango de embajada, y durante la ocupación alemana destacó por su papel como mediador y por su ayuda a la población civil.

ALMUERZO EN EL PALACIO REAL

Los presidentes de las dos Cámaras parlamentarias asistieron al almuerzo que ofrecieron posteriormente los reyes belgas a don Felipe y doña Letizia, al igual que Michel y el ministro Reybel, mientras que entre los comensales españoles figuraban el titular de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, y el jefe de la Casa del Rey, Jaime Alfonsín.

El Palacio Real fue también el escenario de la solemne ceremonia, propia de una visita de Estado -incluida la presencia de seis miembros del Gobierno belga- que Felipe y Matilde dispensaron esta mañana a los Reyes de España, quienes llegaron ayer a Bruselas procedentes de la capital luxemburguesa.

La gira por Luxemburgo y Bélgica que Felipe VI y doña Letizia han completado esta tarde en Bruselas eleva a seis el número de Estados que han visitados oficialmente como Reyes de España en su ronda por países europeos -tres de ellos monarquías-, a los que se sumarán antes de fin de año Italia y Alemania.

Felipe y Matilde de Bélgica, que se convirtieron en reyes de los belgas en julio de 2013, tras la abdicación de Alberto II, tenían previsto haber visitado oficialmente España el pasado marzo, pero hubieron de suspender el viaje dos días antes de su inicio, al coincidir con el duelo decretado por el fallecimiento del expresidente del Gobierno español Adolfo Suárez.

Tras el aplazamiento de aquella visita a Madrid llegaron los preparativos para la abdicación del Rey Juan Carlos y el relevo en la Corona española, de modo que, finalmente, fueron el nuevo monarca belga y su esposa quienes recibieron a principios de agosto al ya Felipe VI en Lieja, donde representó a España en los actos conmemorativos del centenario de la Primera Guerra Mundial.