Decenas de personas resultaron heridas hoy cuando las fuerzas de seguridad dispersaron con chorros de agua y gases lacrimógenos a miles de manifestantes concentrados frente a las entradas del Palacio Presidencial de El Cairo.
La policía y la guardia republicana reaccionaron de esta forma al aumentar el número de manifestantes en la zona, adonde llegaron varias de las marchas convocadas con motivo del segundo aniversario de la caída del régimen de Hosni Mubarak, informó a Efe una fuente policial.
A la llegada de las marchas, las fuerzas de seguridad utilizaron cañones de agua para alejar de los alrededores del Palacio de Al Itihadiya a los manifestantes, que respondieron tirando piedras.
Con el inicio de los primeros enfrentamientos, la policía lanzó decenas de botes de gases lacrimógenos desde seis vehículos blindados de la Seguridad Central apostados en la zona.
Según la fuente policial, cientos de efectivos de la Seguridad Central aguardan en esos coches el momento de intervenir, mientras que numerosas ambulancias están desplegadas en el lugar.
De acuerdo a la versión del Ministerio del Interior, las marchas eran en un principio pacíficas, pero una minoría comenzó a retirar las alambradas instaladas en las entradas del palacio y a lanzar piedras hacia el edificio.
Ante la continuación de las agresiones, se ordenó a las fuerzas de seguridad que intervinieran para proteger el palacio y evitar una escalada de la violencia, señala el ministerio en su comunicado.
Los manifestantes llegaron a la sede de la Presidencia en dos marchas procedentes de las cercanas mezquitas de Rabea al Adauiya y Al Nur.
La oposición egipcia organizó esta jornada varias marchas en El Cairo y otras provincias para conmemorar el derrocamiento de Mubarak y para pedir la renuncia del actual presidente, el islamista Mohamed Mursi.
Ante la posibilidad de que se produjeran actos de violencia, las autoridades intensificaron las medidas de seguridad en el aeropuerto internacional de El Cairo y en las inmediaciones del Palacio Presidencial.
Durante el aniversario del comienzo de la revolución, el pasado 25 de enero, estallaron choques en la capital y otras provincias entre manifestantes y las fuerzas del orden que han causado en las últimas semanas más de cincuenta muertos y un millar de heridos.