El Parlamento de Crimea aprobó este lunes una Declaración de Independencia en la que se dirige a la ONU para que reconozca la soberanía de la nueva república y, al mismo tiempo, a la Federación Rusa para que acepte este territorio como sujeto federal. La República de Crimea, hasta ahora una autonomía en el seno de Ucrania, se autoproclama como "un Estado independiente y soberano, que incluirá todo el territorio de la península bañada por el mar Negro, incluida la ciudad portuaria de Sebastopol", que tendrá un estatus especial.