El viceprimer ministro británico, Nick Clegg, ha dicho hoy que el objetivo de los días de descanso que pasa en Olmedo, donde se le considera un vecino más, es "desconectar un poco" de la política.
Clegg, que lleva 15 años visitando regularmente la localidad nata de su mujer, Miriam González, cuyo padre fue alcalde del pueblo y senador, trata de pasar desapercibido y disfrutar de su familia.
Así lo ha asegurado hoy, en declaraciones a varios medios de comunicación a los que ha atendido después de haber disfrutado de un desayuno en su cafetería habitual con sus tres hijos -Antonio, Alberto y Miguel-, a los que quiere dejar totalmente al margen de su vida pública y a los que pretende transmitir continuamente una sensación de normalidad.
Clegg ha reconocido que Olmedo es una especie de refugio "porque aquí todo el mundo nos conoce desde hace mucho tiempo, siempre nos tratan con mucho cariño y para los niños es especialmente bueno, ya que pueden vivir la vida española y hablar el castellano", a lo que se añaden los juegos con sus tíos, abuela y amigos.
Por ello casi ha conseguido pasar desapercibido y su cargo en el Gobierno británico "no" ha hecho que los olmedanos le traten "de una manera diferente".
"Para mí es un placer enorme estar aquí, escapar un poco de la política y disfrutar de la tranquilidad y la vida familiar y también de la comida española, que es muy diferente a la inglesa y me encanta, sobre todo las croquetas de mi suegra, pero también el jamón, la tortilla o la carne", ha confesado el mandatario británico.
La discreción de la que hace gala la familia Clegg-González se ha hecho más que evidente tras su llegada a Olmedo, ya que muchos vecinos desconocían su presencia e incluso el alcalde de la localidad, Alfonso Centeno no estaba oficialmente al tanto de su presencia.
De hecho, Nick Clegg no cuenta con ningún trato especial, ni goza de espectaculares medidas de protección, y pretende que la normalidad sea la tónica de su estancia en Olmedo, donde disfrutará de la localidad y su entorno durante una semana, para después regresar a Londres y seguir trabajando codo con codo con el primer ministro, David Cameron.
"No me considero como Michelle Obama ni mucho menos. Yo ahora me voy a buscar a mis hijos a casa de la tía de mi mujer, que está aquí al lado, para comer todos juntos y seguir disfrutando de la vida en familia", ha precisado Clegg, casado con la abogada olmedana Miriam González Durántez desde el año 2000.
Se da la circunstancia de que Miriam es hija del que fuera senador por el PP y alcalde de Olmedo, José Antonio González Caviedes, por lo que pertenece a una familia muy conocida y querida en el municipio vallisoletano, donde los vecinos también son cómplices para proteger su privacidad.
Aunque está de vacaciones, Nick Clegg ha reconocido que tiene que "madrugar" igualmente, ya que sus tres hijos -sobre todo el más pequeño, Miguel, de año y medio-, a primera hora ya reclaman la atención de sus progenitores, pero se muestra "encantado" porque así disfruta aún más de estos días de asueto con su familia.