Hugo Chávez, que hoy cumple 57 años, arremete contra quienes rumorean que se ha inventado el cáncer para recuperar popularidad ante las presidenciales de 2012. Los escasos detalles difundidos sobre su enfermedad alimentan especulaciones. Dicen que estoy montando un show, advertía el líder venezolano, y son ellos los que hacen un espectáculo macabro.
Lo hacía en televisión, donde multiplica sus apariciones. Con renovado buen humor y explotando su vena populista, Chávez se palpaba el estómago para demostrar que no lleva una bolsa de colostomía, desmintiendo problemas intestinales. También ironizaba sobre el otro rumor nacional, quién podría reemplazarlo si se queda incapacitado.
Ha descartado que su hermano Adán, su mentor ideológico, y su hija María Gabriela, vayan a sucederle. Soy el candidato y ganaré, aseguraba. Y quitaba hierro a su inminente caía del pelo por la quimioterapia. "Dentro de pocos días ustedes ya verán a Chávez calvo. ¿Se acuerdan ustedes del actor Yul Brynner?, Yul Chávez seré".
Entre bromas e incertidumbre, el chavismo echa el resto en el aniversario del líder bolivariano, que quiere celebrar como nunca antes, ha dicho, para demostrar que sigue el frente del timón y, espera, por muchos años.