El Servicio Secreto de Estados Unidos extremó hoy las medidas de seguridad en la Casa Blanca por un fuerte ruido, que resultó ser una falsa alarma, registrado poco antes de la salida prevista del presidente Barack Obama y su familia hacia Selma (Alabama), donde participará en un acto conmemorativo.
El incidente retrasó 50 minutos la partida del presidente, que se desplazará junto con su esposa Michelle, y sus hijas Sasha y Malia, a la localidad sureña para conmemorar el cincuenta aniversario de la icónica marcha por el derecho de los negros al voto.
El grupo de periodistas que acompaña al presidente informó de que debido a un fuerte ruido fueron dirigidos a la sala de prensa y el Servicio Secreto decretó un "cierre preventivo" de la residencia presidencial mientras investigaban el origen del estruendo.
Según indicó el agente del Servicio Secreto Brian Leary al diario The Hill uno de los puestos callejeros en una de las calles aledañas a la Casa Blanca sufrió un pequeño incendio que "ya ha sido contenido".
El agente indicó además que una de las unidades caninas detectó esta mañana un vehículo "sospechoso" entre las calles 16 y la avenida Constitution que "está siendo investigado".
El cierre temporal fue levantado y la familia presidencial se desplazó a la base de Andrews para viajar en el Air Force One hasta la base de la Fuerza Area de Montgomery (Alabama).
