El Gobierno canadiense está estudiando cambios en las leyes del país para facilitar el arresto de personas que puedan estar "radicalizadas" y ser propensas a cometer ataques como los del miércoles contra el Parlamento.
El ministro de Seguridad Pública, Steven Blaney, dijo en una entrevista con la emisora pública Radio-Canada que el Ejecutivo está considerando una serie de cambios para alcanzar los "umbrales" necesarios que permitan efectuar detenciones.
"Lo que el primer ministro nos ha pedido es que revisemos de forma acelerada los diferentes mecanismos que se ofrecen a la Policía para asegurar la seguridad de todos", afirmó Blaney.
Por su parte, el ministro de Justicia, Peter MacKey, declaró durante una rueda de prensa que está revisando "aquellos elementos del código criminal que permitan una acción preventiva, específicamente en el área de terrorismo".
Los posibles cambios son consecuencia directa de los dos ataques ocurridos esta semana en Canadá. El lunes, un joven "radicalizado" atropelló a dos soldados en las cercanías de Montreal, causando la muerte a uno de ellos.
Y el miércoles, otro individuo que el Gobierno ha calificado de "radicalizado", pero que familiares y amigos han señalado era un drogadicto con problemas mentales, mató a un soldado en Ottawa antes de atacar el edificio del Parlamento canadiense, causando caos y pánico durante horas.
Los dos atacantes, Martin Couture-Roleau, de 25 años de edad, y Michael Zehaf-Bibeau, de 32, resultaron muertos por disparos de las fuerzas de seguridad.
Ambos habían solicitado pasaportes para poder abandonar el país y viajar a Siria, según las autoridades canadienses, pero en ambos casos no se les había concedido. La Policía también ha confirmado que Martin Couture-Roleau era una de las 93 personas en Canadá que estaba siendo vigilada por su radicalización.
Las fuerzas de seguridad han indicado en numerosas ocasiones que las actuales leyes les impiden arrestar y mantener en prisión a aquellos individuos que tienen planeado viajar al extranjero para unirse a fuerzas extremistas como el Estado Islámico.
El director de la Policía Montada canadiense, Bob Paulson, indicó ayer que, en el caso del atacante del Parlamento canadiense, Michael Zehaf-Bibeau, no estaba en la lista de 93 "radicales".
Pero Paulson añadió que su petición de pasaporte estaba siendo retenida por la autoridades, lo que pudo provocar los ataques del miércoles.