La modelo Naomi Campbell declaró este jueves haber recibido "dos o tres pequeñas piedras sucias" de manos de unos desconocidos la noche que conoció al ex presidente de Liberia Charles Taylor, en su comparecencia como testigo en el juicio contra el antiguo dirigente, acusado de crímenes de guerra. Al día siguiente siguiente donó las piedras a la Fundación Nelson Mandela de ayuda a los niños de Sudáfrica.
El testimonio de Campbell no traerá consigo ninguna imputación para la modelo, pero es crucial para el Tribunal Especial de Sierra Leona (TESL) pues Charles Taylor está acusado de financiar a la guerrilla revolucionaria con los llamados "diamantes de sangre". Taylor regaló supuestamente esos diamantes en bruto a la modelo británica tras una cena celebrada en casa de Nelson Mandela, en septiembre de 1997, cuando ella tenía 27 años y él 49.
REGALO NOCTURNO
Campbell, vestida con un traje de chaqueta color crema, un colgante brillante y el pelo recogido, ha explicado que aquella noche se retiró a su habitación tras la cena y, cuando ya dormía, dos hombres llamaron a su puerta para entregarle una pequeña bolsa de tela con "dos o tres pequeñas piedras sucias", que entonces desconocía que fueran diamantes.
"Para mí, los diamantes son algo bonito, brillante, vienen en una caja, y no era eso lo que parecían", ha añadido.
"Éste es un regalo para usted", le dijeron los dos hombres, que no se identificaron, según ha declarado la "top-model".
La mañana siguiente, Campbell comentó el episodio en el desayuno celebrado en la casa presidencial de los Mandela con su agente, Carole White, y con otra de las invitadas, la actriz Mia Farrow.Según Campbell, "una de las dos" -sin recordar cuál- le dijo que el responsable del regalo "debía ser Charles Taylor".La modelo británica ha asegurado que aquella noche fue la primera y única vez que vio a Taylor y que a la mañana siguiente donó las piedras a la Fundación Nelson Mandela de ayuda a los niños de Sudáfrica.
Así, según Campbell, las "piedras" no estuvieron en su poder más de seis horas, pues tras el desayuno las entregó al entonces jefe de la Fundación Nelson Mandela, Jeremy Radcliffe. La modelo ha explicado que no había vuelto a contactar hasta el año pasado con Radcliffe, quien le dijo que todavía tenía en sus manos los diamantes, pues le había "sido imposible" sacar rendimiento al regalo para invertirlo en los niños de Sudáfrica.
ACABAR CON TODO CUANTO ANTES
Campbell se ha mostrado tranquila ante las primeras preguntas de la fiscal, Brenda Hollis, pero ha expresado la "incomodidad" que representa para ella su participación en el juicio y su voluntad de "acabar con todo esto cuanto antes" para seguir con su vida. La modelo ha apuntado que le preocupa "la seguridad de su familia" pues ha visto en internet que Taylor "ha matado a un montón de gente" y no quiere que su familia "esté en peligro de ningún modo".
Según la modelo, hasta conocer a Charles Taylor esa noche, "nunca había oído hablar de un país llamado Liberia, ni de los diamantes de sangre". El TESL ha reservado seis horas del día de hoy para el testimonio de Campbell, que de no completarse hoy se retomará en la sesión de mañana.
Charles Taylor está siendo juzgado desde enero de 2008 en La Haya por once cargos de crímenes de guerra y contra la humanidad por su implicación en el conflicto civil que asoló Sierra Leona entre 1991 y 2002, y que causó unos 50.000 muertos.