El volcán Monte Merapi, situado cerca de la ciudad indonesia de Yogyakarta, en la provincia de Java Central, ha vuelto a generar una erupción este viernes, causando la muerte de otras 65 personas, de manera que el número de víctimas mortales supera ya las cien.
El Monte Merapi empezó a expulsar nubes de ceniza y gas caliente la semana pasada, y desde entonces ha ocasionado la muerte a 109 personas y forzado la evacuación de más de 150.000, según afirmó este viernes el ministro de Bienestar, Agung Laksono.
Rizal, un médico forense de la unidad de identificación de la Policía de Yakarta, dijo que al hospital de Sardjito, en Yongyakarta, han llegado al menos 58 cadáveres quemados, según informa el canal Metro TV. "Es posible que el balance de muertos aumente mientras buscamos a las víctimas", añadió.
Además, la Agencia Nacional de Mitigación de Desastres cifra en casi 200 las personas que han resultado heridas como consecuencia de las erupciones.
HUMO Y CENIZA
El aeropuerto internacional de Yogyakarta está cerrado y los vuelos que tienen como destino esta ciudad han sido desviados a la ciudad de Solo. Un fotógrafo de la agencia Reuters indicó que en Yogyakarta hay tanto humo que los automovilistas tienen que llevar las luces del coche encendidas también durante el día. "No podemos ver nada, está muy oscuro. (...) Es como si lloviese arena", declaró.
Una columna de ceniza asciende a una altura de al menos 4 kilómetros por encima del Monte Merapi. El vulcanólogo más destacado de Indonesia, Surono, señaló que las autoridades han evacuado las localidades situadas en un radio de 20 kilómetros. "Es mucho peor que otras veces. No podemos predecir su comportamiento", advirtió.
Con el propósito de convencer a la gente de que se marche a zonas más seguras, el presidente indonesio, Susilo Bambang Yudhoyono, aseguró que el Gobierno cubrirá los gastos originados por la muerte del ganado a causa de la actividad del volcán. "No hay indicios de que el Merapi se esté calmando", añadió.
Indonesia se enfrenta también a las consecuencias del tsunami que se produjo la semana pasada a raíz de un terremoto en las islas Mentawai, junto a la costa de Sumatra, y que ha provocado la muerte de al menos 431 personas.