La Alianza Bolivariana respaldan a Ecuador frente a Gran Bretaña

Correa, Ecuador
Correa, Ecuador |Telemadrid

Ecuador se mostró abierto al diálogo con el Reino Unido si este primero retira la "amenaza" de irrumpir en la embajada del país andino en Londres para arrestar al fundador de WikiLeaks, Julián Assange, al que Quito le concedió asilo diplomático.

"Hemos estado dos meses conversando con ellos (Reino Unido) y la respuesta final fue una amenaza. Esperamos que la amenaza sea depuesta y con mucho gusto vamos a conversar con ellos, no tenemos ningún problema, esto es lo que quisimos desde un primer momento, pero con una amenaza encima uno no puede conversar", dijo Patiño.

Aclaró que no están "negociando" con el Reino Unido pues Ecuador toma sus decisiones de forma "soberana".

"Estábamos conversando para ver si es que era posible obtener una declaración de garantías para la vida del señor Assange, de que no lo extraditaran a un tercer país", añadió en la rueda de prensa en Guayaquil posterior al IX Consejo político de la Alianza Bolivariana para los pueblos de Nuestra América (ALBA).

Patiño señaló que creían que las conversaciones se hacían en base al "respeto" pero cuando este se perdió "por supuesto que las condiciones para sentarnos a conversar también son mucho más limitadas", dijo.

El canciller denunció el pasado miércoles que el Gobierno del Reino Unido "amenazó" a través de una carta con irrumpir en la embajada en Londres para arrestar a Assange y extraditarlo a Suecia donde se lo investiga por presuntos delitos sexuales, que él niega.

Patiño aseguró que la amenaza "todavía está pendiente porque no ha sido retirada", y reiteró que si la quitan no tienen "ningún inconveniente" en seguir conversando "respetuosamente".

El titular de la diplomacia ecuatoriana comentó que sin un salvoconducto, Assange no podrá salir de la embajada, y no descartó que posteriormente pudiesen acudir a tribunales internacionales para lograr que Londres lo facilite.

Agregó que el suyo no es un país que pueda responder con violencia, pero sí con la solidaridad de otras naciones.

"No queremos más amenazas, queremos diálogo, podemos conversar lo que se quiera, pero la dignidad de un pueblo, la soberanía no se vende, no se negocia, no se discute. Lo que se discuten son los temas políticos y eso estamos dispuestos a hacerlo", indicó.

Consideró que la tensión provocada por el caso Assange no debe afectar las relaciones comerciales con el Reino Unido, así como tampoco las de cooperación o culturales, entre otras.

Consultado sobre la posición de EE.UU., el canciller de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo que la primera reacción de Washington ha sido "ponerse de espaldas" a América "una vez más" y tratar de reducir el tema a un asunto bilateral "cuando hay una seria amenaza de violación al derecho internacional".

La ALBA reunida en Guayaquil se solidarizó con Ecuador y rechazó "las amenazas intimidatorias" de voceros británicos por "violatorias de los principios de soberanía e integridad territorial de las naciones y de los principios del Derecho Internacional".

Asimismo, en la declaración final del encuentro rechazó "la posición de Reino Unido de pretender resolver de manera contraria al Derecho Internacional, las controversias con las naciones del mundo, y particularmente de América Latina y el Caribe".

Además, advirtió al gobierno británico "acerca de las graves consecuencias que se desencadenarían en todo el mundo, en caso de una agresión directa a la integridad territorial de la hermana República del Ecuador en Londres", aunque no entró en detalles.

Formuló un llamamiento a todos los gobiernos del mundo, a los movimientos sociales, a la intelectualidad a oponerse a "esta nueva pretensión del Gobierno británico de imponer por la fuerza su voluntad a las naciones soberanas del mundo".

El encuentro internacional se dio dos días después que Ecuador concediera asilo diplomático a Assange, que se refugió en la embajada de Ecuador en Londres el pasado 19 de junio, pero que no puede abandonarla por falta de un salvoconducto.

Ecuador ha señalado que la razón fundamental para otorgar el asilo a Assange fue que no obtuvo garantías ni del Reino Unido ni de Suecia de que no sería extraditado a un tercer país, donde podría estar en peligro la vida del fundador de WikiLeaks.