La vivienda sobre plano y en construcción retoma el protagonismo en el Salón Inmobiliario de Madrid (SIMA) a diferencia de ediciones anteriores, en las que las empresas se afanaban por dar salida al stock que quedó sin vender por la crisis, lo que muestra la recuperación del sector y de la confianza del comprador.
En su décimo octava edición, el salón, que permanecerá abierto desde hoy y hasta el domingo, contará con la participación de más de 200 empresas que pondrán a disposición de los visitante más de 400 promociones, de las que más del 60 % corresponden a viviendas sobre plano o en construcción.
"Por primera vez en muchos años, cambia la relación entre la oferta de vivienda terminada y la oferta de vivienda en construcción o sobre plano. Ahora, la mayoría de la oferta corresponde a la segunda tipología, ha explicado hoy a Efe el director del SIMA, Eloy Bohúa.
En su opinión, este cambio indica una mayor confianza por parte de las empresas, ya que se trata de un proyecto empresarial con riesgos, así como una mayor confianza del consumidor en el futuro.
"Si se pone un producto nuevo en el mercado es porque existe una demanda que lo va a comprar. Además, esa demanda necesita hipotecarse en la mayoría de los casos para comprar una vivienda. Por tanto, indica una mayor confianza del comprador en el futuro", ha añadido.
En paralelo, se confirma que los descuentos "agresivos" han dejado de ser el principal reclamo para atraer a los potenciales compradores.
"Teniendo en cuenta que una parte importante del producto que se presenta aquí es de la Comunidad de Madrid, donde el ajuste de precios creemos que finalizó en los primeros meses de 2015, las ofertas ya no son el gancho promocional de los expositores", ha explicado Bohúa.
Los estudios apuntan a que las grandes ciudades están tirando del mercado inmobiliario con más fuerza "y eso se refleja en que el precio está creciendo en la mayoría de los distritos de Madrid y en los municipios de la corona metropolitana".
Por otra parte, según las encuestas que realizan, el 95 % de las personas que visitan el salón está en proceso de búsqueda de una vivienda.
De ese 95 %, dos tercios ve algo en SIMA que se ajusta a sus necesidades y, de estos, la mitad espera comprar algo de lo que ha visto en el salón, según Bohúa, quien ha asegurado que es imposible saber si esa posible compra se materializa o no.
No obstante, ha defendido, SIMA es un termómetro de la actividad del sector, una herramienta comercial para las empresas expositoras muy interesante" y una herramienta de búsqueda de compra muy importante también para el comprador.
Según los datos que manejan, la mayoría de los visitantes buscan en SIMA su primera vivienda, aunque entre el 15 y el 20 % se acerca en busca de casa en la playa y entre el 15 y el 20 % presenta un perfil inversor.
La ministra de Fomento en funciones, Ana Pastor, ha afirmado durante su visita al SIMA, que el salón está "más lleno que nunca" y que los datos muestran la recuperación del sector inmobiliario, que el año pasado creció el 4,5 % y generó 50.000 puestos de trabajo tras ejercicios de "permanente destrucción de empleo".
"Son noticias muy positivas para la economía española y para los ciudadanos", ha añadido Pastor, quien ha enviado un mensaje de optimismo y de confianza a los inversores, y ha apuntado que lo que necesita España son políticas estables y seguir con un plan de vivienda con recursos.
De vuelta a los datos del XVIII SIMA, la Comunidad de Madrid acapara el mayor porcentaje de viviendas que se comercializarán en SIMA, con casi la mitad de la oferta. Por detrás se sitúan Alicante (22 %), Murcia (8 %), Málaga (7 %) y Castellón (5 %).
El 68 % de las promociones que se ofertan son para primera vivienda y el resto residencias vacacionales.
La tipología más frecuente responde a un piso con una superficie media de 98,2 metros construidos, de tres habitaciones y con un precio a partir de los 65.000 euros en la Comunidad de Madrid, un precio que en el caso de la vivida vacacional baja hasta los 25.000 euros.
La otra gran novedad es el salto internacional de la feria, que este año contará con una treintena de marcas comerciales procedentes de 12 países.