La prima de riesgo española, el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, subió hoy desde los 310 puntos básicos de la apertura hasta los 329 que marcó al final de la sesión, y ello pese al acuerdo alcanzado por los líderes europeos para atajar la crisis de deuda.
Según los datos de mercado recogidos por Efe, la rentabilidad del bono español pasaba del 5,326 % de esta mañana al 5,472 %, y la del bono germano bajaba del 2,227 % hasta el 2,174 %.
El alza de hoy se produce un día después de que la prima de riesgo española registrase su tercera mayor caída del año y se colocara en 312 puntos básicos, debido a la confianza generada por el acuerdo de la UE.
Dicho acuerdo incluía una reducción de la deuda griega, la ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), además de que se concretaban los términos de la recapitalización de los bancos.
No obstante, la falta de detalles en dichos acuerdos parecen haber desmotivado al mercado, que acogió con pesimismo el resultado de la subasta llevada a cabo por el Tesoro italiano, que consiguió colocar 2.979 millones de euros en bonos a 10 años, pero con un interés que superó el 6 %, lo que supone un récord desde la creación del euro.
Así, la prima de riesgo italiana subía hasta los 382 puntos básicos frente a los 366 de la apertura.
Por su parte, la prima de riesgo de Portugal cerraba en 898 puntos básicos y la de Grecia en 1.934, en tanto que la de Irlanda lo hizo en 562 puntos básicos.
Los seguros de impago de deuda (credit default swap o CDS) relativos a los bonos a diez años de España para cubrir la posibilidad de impago de 10 millones de dólares se cambiaban a 299.000 dólares anuales, por debajo de los 323.000 de esta mañana.
LEVE RETROCESO DEL IBEX35
La bolsa española corrigió hoy posiciones y bajó el 0,50 %, movida tanto por el deseo de los inversores de recoger beneficios como por la falta de impulsos que justificaran un nuevo avance como el de ayer, que permitió que la semana se cerrara con una revalorización del 4,19 %.
El principal selectivo del mercado español, el IBEX-35, se colocó en 9.224,40 unidades tras comportarse de forma prudente, como el resto de sus homólogos europeos, que ayer se anotaron sus mayores alzas de 2011 por las medidas de la cumbre de la Unión Europea para resolver la crisis de la deuda soberana.
LOS PARQUÉS EUROPEOS TAMBIÉN REGISTRAN CAÍDAS
Por ejemplo, el CAC 40 francés retrocedió el 0,59 % mientras que el FTSE 100 británico descendió el 0,20 % y el DAX alemán subió el 0,13 %.
La excepción a esa prudencia fue el FTSE MIB italiano, que retrocedió el 1,78 % después del mal resultado de la subasta de bonos a 10 años, cuya demanda fue escasa y que además se saldó con la colocación de títulos con más de un 6 % de interés, lo que supone un récord desde la creación del euro.
Tras subir ayer un 4,96 %, su segundo mayor avance en el año, el indicador español se tomó hoy un respiro arrastrado por los números rojos que mostraron la mayoría de los grandes valores.
Por ejemplo, Iberdrola, Repsol o Telefónica retrocedieron el 1,28 %, el 0,65 % y el 0,63 %, respectivamente, mientras que el Santander bajó sólo el 0,19 % y el BBVA consiguió esquivar los números rojos y avanzar el 0,90 %.
"La jornada de hoy es de transición, aunque la corrección es reducida teniendo en cuenta que el IBEX 35 tuvo el jueves su segunda mayor subida del año", señaló en declaraciones a Efe el analista de CM Capital Markets Jorge Lage, que espera una clara tendencia alcista para la próxima semana.
La subida más pronunciada del IBEX 35 correspondió a Ebro Foods, que se revalorizó el 3,35 %, seguida de Técnicas Reunidas, con el 2,26 %; de Grifols, con el 1,86 %, y del Banco Popular, con un alza del 1,78 % tras anunciar que registró un beneficio neto de 404 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, el 22,5 % menos que en 2010.
Bankia, que también presentó resultados (con un beneficio de 295 millones entre enero y septiembre), cerró con un avance del 0,68 %.
El punto negativo de la jornada estuvo en el mercado secundario de deuda, donde la prima de riesgo de España o diferencial con Alemania repuntó hasta los 333 puntos básicos debido al avance de la rentabilidad de los bonos españoles, que resultaron afectados por el mal resultado de la subasta de títulos de Italia.