La buena marcha del mercado laboral alemán, que ha cerrado 2012 con las mejores cifras de paro en los últimos veinte años, unido a la incesante destrucción de empleo en España ha provocado la marcha de trabajadores en busca de oportunidades en Alemania, algo que, hasta octubre de 2012, habían conseguido un total de 49.433 españoles, según refleja un informe elaborado por la Oficina Federal de Empleo germana (Bundesagentur for Arbeit).
"Grecia, Italia, Portugal y España son los países más afectados por la crisis de deuda de la UE y sus ciudadanos son los que se enfrentan a mayores dificultades laborales", sostienen los autores del informe, que no dudan en destacar que "actualmente Alemania representa una buena oportunidad de empleo para los trabajadores cualificados".
En este sentido, los datos de la Oficina Federal de Empleo de Alemania actualizados hasta octubre de 2012 muestran que un total de 49.433 españoles trabajan en el país, un 15,8% más que un año antes, mientras que otros 8.766 habían presentado solicitudes de empleo, un 16,2%.
A estos trabajadores y demandantes de empleo hay que añadir otros 7.729 españoles que disfrutaban algún tipo de subsidio, un 10,5% más que el año anterior.
A pesar del fuerte incremento de los empleados españoles, el mayor entre los cuatro países periféricos analizados, los trabajadores procedentes de España son aún una minoría en comparación con los italianos (235.093), griegos (123.322) y portugueses (56.958).
De hecho, el incremento registrado en octubre de 2012 de trabajadores procedentes de estas cuatro nacionalidades periféricas fue de 33.000 empleados, un 7,6% más, hasta un total de 464.806, muy por encima del dato de crecimiento del 1,1% del total del mercado laboral germano.
No obstante, este incremento fue inferior al experimentado por los trabajadores procedentes de países como Polonia, Hungría, República Checa, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Letonia y Lituania, que aumentaron en octubre en 88.000 contrataciones, un 31% más.